La denuncia realizada por el vicepresidente del Cuerpo Médico del Hospital de Huaral, Dr. Juan Díaz Amado, sobre el deterioro de 312 vacunas pentavalentes, aún no es tomada en cuenta por el director del nosocomio Francisco Chunga, ni por algún funcionario regional y menos por la consejera por Huaral Licenciada Nelly Tan Sánchez.
Pero, esto se agrava más, cuando se ha tomado conocimiento de que la cantidad de vacunas deterioradas es mayor, que pasan de 500 y a pesar de la gravedad del hecho nadie se ha responsabilizado, el que se hace mayor cuando las madres acuden al hospital para vacunar a sus hijos y se encuentran con que no hay vacunas.
Por las informaciones que han trascendido estas vacunas llegaron al hospital el 8 de diciembre y recién se dieron cuenta de ello el 28 del mismo mes, cuando ya eran inservibles, por no haberlas puestos en refrigeración, ya que su manipuleo requiere de cuidados especiales en cada una de sus etapas de traslado, conocida como cadena de frío, su conservación debe de ser con una temperatura entre +2° y +8°C. La falla en una de sus etapas malogra a las vacunas irremediablemente, por lo cual existen normas de fiscalización para que ello no suceda, fiscalización que, todo hace ver, nadie realiza dentro del hospital de Huaral
La vacuna polivalente es aplicada a partir de los dos años a los niños. Para aprovechar las ventajas de las vacunas múltiples, a partir de 1999 se aplica la vacuna pentavalente (DPT+HB+Hib), la cual confiere protección contra difteria, tos ferina, tétanos, hepatitis B e infecciones invasivas por Haemophilus influenzae. Se aplica en 3 dosis a los 2, 4 y 6 meses y su utilización es obligatoria para salvaguardar la salud de nuestros niños y su aplicación está enmarcada dentro de la política de salud del Estado peruano, Negarle la posibilidad de hacerlo es una gran irresponsabilidad, sin exagerar, puede ser catalogado como un delito de lesa humanidad.
Quienes conocen los graves problemas administrativos que hay dentro del hospital San Juan Bautista, se preguntan; ¿hasta cuándo las autoridades regionales de salud seguirán apañando tanta incompetencia?
