Una madre de familia fue atacada brutalmente luego alertar a la Policía que sus vecinos estaban realizando una fiesta clandestina en pleno horario de toque de queda. El hecho ocurrió en la cuadra 23 de la avenida Costanera, en San Miguel.
Según contó la hija de la víctima, Elsa Aybar Guillén acompañó a los policías hasta la vivienda en cuestión pero al llegar, los asistentes a la reunión habían apagado las luces y no hacían ruidos, por lo que los efectivos la retornaron hasta su domicilio y luego se retiraron del lugar.
Minutos después un grupo de personas tocó su puerta y al abrir fue agredida brutalmente hasta quedar inconsciente, por lo que tuvo que ser trasladada de emergencia al hospital Daniel Alcides Carrión del Callao.
“Ellos [agresores] se enteraron de que mi mamá fue y ahí reventaron la puerta y ahí es donde mi mamá sale y la arrastran, la tiran al piso, la patean y como se ve en las imágenes que pasé ella tiene el rostro desfigurado. Tiene un corte en el párpado”, lamentó la hija de la víctima.
