Se muestra, siempre seductora en sus grabaciones, tratando de develar un rostro angelical, pero detrás de esos videos oculta a una avezada gatillera, asaltante y cabecilla de Los Injertos del Norte Chico, la única mujer que viene dirigiendo una banda criminal en esta zona del país, la misma que fue detenida y que a los 15 días fue liberada, volviendo a las calles a delinquir.
Muy pocas veces su accionar ha sido captado por una cámara de seguridad, pero se sabe que se ha vuelto la reina de los asaltos en el norte chico. Se hace llamar La Diabla y con tan sólo 26 años, ya es una temida delincuente, conocida en el mundo del hampa donde su palabra es ley.
Esta mujer tiktokera, ante la sociedad aparentaba ser una abnegada madre de familia, pero en realidad es una joven que maneja una organización a su antojo, cuyos delincuentes, según la policía, han cometido más de quince robos en menos de cinco meses.
La Diabla es la que siempre observa a lo lejos, mientras sus pistoleros, sin piedad, hacen lo suyo. Son decenas las personas que la acusan y a Los Injertos del Norte como los responsables de los asaltos a mano armada.
Se sabe que ella tiene en la mira a los clientes de dos conocidas entidades financieras de Huaral y Chancay, los mismos que salen cargados con fuertes cantidades de dinero de los establecimientos y quienes son abordados por estos delincuentes, tan solo a unas cuadras.
Desde que cumplió la mayoría de edad, ha estado inmersa en un mundo donde corren balas y se perciben muertes. Siempre rodeada de delincuentes, formó una familia con un ranqueado criminal. A los pocos años, se separó para entablar una nueva relación con el conocido como El Piercing, otro prontuariado, el mismo que realiza los atracos a mano armada con los demás integrantes de Los Injertos del Norte.
Un amor a prueba de balas, donde Carmen Ostos es la jefa de la banda y Gian Carlos Morales Verastegui, alias Piercing, su gatillero. Un joven cuatro años menor que ella y con el que se deja ver en distintas grabaciones, en la intimidad de una habitación, portando armas de fuego.
A pesar de su corta edad, este delincuente ya forma parte de una de las más peligrosas bandas que viene operando en el norte chico, su destreza con las pistolas, lo han vuelto en un personaje buscado por las autoridades. Él sería el mismo que sale en un video usando una polera negra, y que ingresa a asaltar a una persona, que previamente, ya había divisado La Diabla, ya que la víctima también había retirado mucho dinero del banco.
En otro video se observa a La Diabla realizando la modalidad del marcaje a un empresario. Entra y sale de una moto, siempre se le ve hablando por teléfono brindando la información de su próximo blanco a sus cómplices. Y una vez que el plan está ejecutado, se retira del lugar como si nada hubiera pasado.
Aquí, se le ve disfrutando de la vida, mostrando su mejor sonrisa, luciendo siempre bien arreglada, con uñas y pestañas postizas, sacando lustre a sus nuevas adquisiciones, gustos que se daba con el dinero producto de sus asaltos.
Pero, tras un exhaustivo trabajo de la policía de Huaral, se logró capturar a Los Injertos del Norte Chico, cuando se encontraban celebrando su último atraco. Aunque, alias La Diabla no cayó sola, junto a ella se encontraba su pareja, alias El Piercing y otros asaltantes más.
Increíblemente, cuando se creyó que los delitos de la mujer y sus cómplices habían llegado a su fin, el fiscal Felix Miranda Vargas, quien estaba a cargo de la investigación los puso nuevamente en las calles, a pesar de las pruebas en su contra.
Fuente : America Noticias