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Gobierno peruano gasta menos dinero que Chile en la salud de su población

El gasto que realiza el Gobierno en la salud de la población al año asciende a S/ 874 por persona, según un estudio de Videnza Consultores y ComexPerú.

La cifra es más baja que el gasto que realiza Chile, que invierte S/ 2,216 por persona para cubrir las necesidades públicas de salud.

El gasto público del Perú en salud es también mucho menor que el que realizan los países pertenecientes a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OECD), donde se invierten S/ 5,297 por persona en promedio.

Ante esto, el informe sostiene que el financiamiento público es insuficiente y está gestionado de forma ineficiente.

«Si bien el número de ciudadanos con seguro creció significativamente en los últimos años (llega al 98%), no hay un incremento proporcional de los recursos públicos para solventar las atenciones de estos nuevos asegurados», señala el estudio.

Solo en el Seguro Integral de Salud (SIS) el gasto estimado es de S/ 552 por segurado, lo que implica que solo se esté financiando el 57% de lo necesario para cubrir el Plan Esencial de Aseguramiento en Salud a los 23 millones de afiliados.

Incluso observando el gasto por regiones se observa una gran desigualdad. En regiones como Lima (S/757.82) y Arequipa (S/587.92) el gasto es mayor por afiliados al SIS que en Puno (S/449.55) o La Libertad (S/352.70).


«Esta inequidad perjudica a los pacientes, especialmente a los afectados por enfermedades complejas y costosas», agrega el informe.

Esta situación generó que, durante la emergencia sanitaria, los hogares de menores recursos gastaron hasta 4.5 veces más en salud que en pandemia.

«La población de menores recursos, habitualmente del sector informal y que no cuenta con seguro social, debe hacer largas colas para acceder a la atención en los grandes hospitales públicos, ante el deficiente estado de las postas médicas cercanas a sus hogares. Y el 91% asegurado en entidades de sector público, recibe una atención ineficiente o de baja calidad que no resuelve sus problemas», sostienen.

Un 43% de los usuarios que reciben una receta médica en los establecimientos públicos compra medicamentos en las boticas y farmacias privadas pues solo cuatro de cada 10 Instituciones prestadoras de servicios de salud tiene una disponibilidad mayor al 80% de medicamentos esenciales.

Otros problemas que evidencia el sistema de salud es que uno de cada dos establecimientos de salud públicos del primer de atención no tiene médico.

Asimismo, nueve de cada 10 de estos establecimientos de salud no cuentan con la infraestructura y equipamiento adecuado.

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