Tras el catastrófico derramamiento de petróleo en la playa de Ventanilla, una serie de playas se han visto afectadas.
Entre ellas se encuentran las playas de Aucallama y Chancay, las cuales se estaban preparando para poder recibir a todos ciudadanos durante este verano.
Sin embargo, tras este hecho tan lamentable, esas playas quedarían prohibidas para los veraneantes, debido al alto contenido de petróleo.
Por otro lado, la Dirección General de Salud Ambiental, informó a la población, sobre todo a los bañistas no acudir a estas playas, ya que pueden ser un grave peligro para su salud.
Recordemos que este desastre ecológico ha afectado en gran proporción la vida marina, la flora y fauna de este ecosistema, por lo que se pide a la ciudadanía tomar precauciones y evitar dirigirse a estas zonas costeras.
La entidad precisó que este derrame ha afectado a las playas y la biodiversidad marina y que inspecciones realizadas dan cuenta de la contaminación del agua y arena.
En Ventanilla, las playas afectadas son Bahía Blanca, Costa Azul y Cavero; en Santa Rosa son Playa Chica, Playa Grande 1, Playa Grande 2, Hondable y Los Corales y en Ancón las playas afectadas son Dieciocho Ancón, Hermosa, Las Conchitas, Miramar 1, Miramar 2, San Francisco Chico, San Francisco Grande, D´onofrio, Casino Náutico, Enanos, Esmar 1, Esmar 2 y Los Pocitos.
“Se recomienda a la población en general, como medida de prevención y salvaguarda de su salud, no acudir a las playas antes mencionadas por encontrarse con calificación de ‘no saludable’”, refiere Digesa en su comunicado.
Se espera, que el Director Regional de Salud evalue la situación en las playas de la Provincia de Huaral, para de esta manera informar a los ciudadanos, sobre el grave peligro que significa ingresar al mar.
