Al menos 200 viviendas resultaron consumidas por las llamas y alrededor de 600 personas quedaron sin techo este lunes durante un incendio que afectó al campamento irregular de Laguna Verde ubicado en la ciudad de Iquique, al norte de Chile, de acuerdo con la información compartida a través de la Alianza Informativa Latinoamericana (AIL) este miércoles.
Mientras que el delegado presidencial de la región de Tarapacá, Miguel Ángel Quezada, quien lamentó la pérdida de los enseres y viviendas de los ciudadanos e informó que hay niños y adultos mayores entre los damnificados, indicó ayer que las viviendas afectadas eran 100 y los damnificados 400
«Las familias están siendo evacuadas y nos hemos puesto a disposición para colaborar con quienes se han visto afectados», agregó por su parte el ministro de Vivienda y Urbanismo, Felipe Ward, a través de su cuenta de Twitter.
Por ahora, las autoridades han descartado la presencia de víctimas mortales o heridos graves así como la posibilidad de que el incendio haya sido intencionado, achacándolo a las condiciones de extremo calor que se registraron durante la jornada.
El fuego comenzó durante la tarde y las llamas se extendieron en pocas las horas, lo que llevó a la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior (Onemi) a declarar alerta amarilla y emitir un reporte alertando sobre la «presencia de viviendas irregulares y el difícil acceso al lugar».
Desde el cuerpo de Bomberos desplegaron varias unidades que trabajaron durante varias horas e informaron que las condiciones de hacinamiento de las viviendas, los angostos pasajes del asentamiento y la falta de red de agua dificultaron la labor de extinción de las llamas.