Paraguay está culminando la primera fase de la llamada “cuarentena inteligente” que inició el 4 de mayo, y el próximo lunes 25 de mayo se dispone a entrar en la segunda fase.
Según las autoridades sanitarias, esto implica un periodo de mayor flexibilización de actividades hasta el 15 de junio, cuando se volverá a hacer un balance antes de ingresar a otra etapa.
El Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social anunció que los expertos evalúan los resultados de la primera fase de la cuarentena y el viernes darán a conocer las nuevas medidas para iniciar, desde la próxima semana, la segunda fase.
El viceministro de Atención Integral de la Salud del ministerio, Juan Carlos Portillo, manifestó que, con los resultados favorables observados, se puede anticipar que no habría mayores problemas para la transición hacia la segunda fase. Incluso se analiza la posibilidad de incorporar actividades de algunos sectores que en la planificación inicial estaban previstas para la tercera fase, pero con algunos ajustes.
“No se trata de saltar una fase sino traer ese conjunto de actividades y adecuarlos a las características y conceptos de la fase dos, y permitir la reincorporación de sectores más diversos. Es una forma de contribuir a la reactivación económica. La idea es ir ampliando gradualmente”, sostuvo la autoridad sanitaria.
Adriana Amarilla, directora de Promoción de la Salud, explicó a los medios de prensa que, por ejemplo, las tiendas en general y las peluquerías ya podrán brindar sus servicios al público bajo estrictos protocolos de seguridad, toda vez que el Gobierno lo autorice tras la revisión final de este viernes.
El ministro de Salud, Julio Mazzoleni, ya adelantó que la “cuarentena inteligente” está dando resultados positivos y por el momento existe “una baja circulación comunitaria del virus”.
Paraguay registra 829 infectados con coronavirus y 11 fallecidos, según el informe de este martes del Ministerio de Salud. La mayoría de los casos confirmados son importados, según datos oficiales.
Este martes, el presidente Mario Abdo Benítez participó de manera virtual como invitado especial, junto a otros cuatro presidentes, en la ceremonia de clausura de la 73 edición de la Asamblea de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Abdo Benítez se refirió a las medidas “drásticas y de alto impacto” que debió adoptar su Gobierno ante los primeros casos de covid-19 en el país.
“Luego del segundo caso positivo registrado en el país tomamos una decisión que para algunos fue exagerada, pero (se tomó) conociendo la realidad de nuestro pueblo, de nuestro sistema de salud, y viendo cómo en los países en donde estaba más avanzada la pandemia y con mayor capacidad era muy difícil que algún sistema de salud estuviera preparado para enfrentar algo como esto. Y así fue como decidimos de manera drástica cerrar fronteras, cerrar escuelas y llamar a cuarentena. Esa fue nuestra estrategia, tomar una decisión de alto impacto para toda la ciudadanía que despertara el interés inmediato por respetar las normas sanitarias, los protocolos sanitarios”, expresó el mandatario paraguayo en su alocución virtual ante la OMS.
Paraguay suspendió las clases y eventos públicos el 10 de marzo y cerró sus fronteras el 24 de marzo hasta nuevo aviso.
