Un bebé de solo 10 meses de nacido fue víctima de sus propios padres, quienes acabaron con su vida asfixiándolo con una bolsa de plástico. Ellos solo atinaron a decir que lo mataron “por problemas económicos y pleitos familiares”.
La pareja de filicidas intentó encubrir su delito y tuvieron la sangre fría de comunicar del hecho a la comisaría indicando que murió por causas naturales; sin embargo, levantaron sospechas y al final, presionados por la Policía confesaron su terrible acto.
Confesaron su crimen
De acuerdo a información policial, el primer día de mayo, los convivientes Ramiro Mamani Mamani (19) y Diana Carolina Cori Luque (18) acudieron a la comisaría de Yunguyo para comunicar la muerte de su hijo de 10 meses de nacido.
Aparentemente se trataba de una muerte por enfermedad, no obstante, al comportamiento sospechoso de la pareja, se unieron los hallazgos de la necropsia que se realizó al día siguiente a la una de la tarde.
El pequeño cuerpo tenía marcas llamadas equímosis y excoriaciones, es decir huellas de violencia aplicada en su contra. Con estos indicios, los policías decidieron ir al domicilio de la pareja ubicado en el jirón José María Arquedas 677.
Justo en el momento de la llegada de los policías, ambos cargaban equipaje para su fuga, por lo cual fueron detenidos. Ya en instalaciones policiales, se sometió a los sospechosos a exhaustivo interrogatorio con el cual ambos empezaron a caer en contradicciones.
Finalmente, aceptaron haber matado a su hijo asfixiándolo con una bolsa de plástico. justificando su terrible hecho diciendo que atravesaban problemas familiares y económicos.
