Hace unas semanas atrás el titular de la Dirección General de Tecnologías Educativas (DIGETE), Oscar Becerra, señalo que ninguna otra autoridad pública o privada tiene la facultad de atribuirse la entrega de las computadoras portátiles o cualquier otro tipo de material, tomando el nombre del Programa OLPC o el Ministerio de Educación, salvo expresa decisión o coordinación con las autoridades de DIGETE y previa suscripción de un convenio.
Al tiempo de asegurar que para los próximos cuatro o cinco meses, tienen programada la distribución de medio millón laptops adquiridas por el Estado para ser entregadas, totalmente gratis, a las escuelas y colegios del Perú, refirió que los gobiernos regionales o locales pueden hacer que la ejecución del programa del Ministerio de Educación, “Una laptop por niño” (OLPC), sea más rápida, asumiendo los costos de transporte de las computadoras y otros accesorios de última generación desde Lima a sus instituciones educativas públicas.
Por ejemplo, en el caso de la región Lima Provincias, que comprende a Cañete, Huara, Huaral, Cajatambo, Canta, Yauyos, Oyón y Huarochirí, el Ministerio de Educación ha entregado, 10 mil 865 computadoras XO, favoreciendo el estudio de 58 mil 907 alumnos y 3 mil 500 docentes de 583 instituciones educativas del Estado.
Por lo que ante este testimonio podremos asumir que lo suscitado anteayer en una ceremonia realizada en nuestra Plaza de Armas, donde el presidente del Gobierno Regional, Javier Alvarado del Valle, realizó la entrega pública de etas laptops destinada por el Gobierno Central, se cometió un exceso de figuración, tal vez con la intención de levantar un poco la alicaída imagen de la gestión actual, por lo que hubiera sido mejor que este programa hubiera recibido un aporte adicional de este gobierno, antes que sólo hacer partícipe de esta actividad a los alumnos que se apostaron hacia esta ceremonia, perdiendo horas de clases irrecuperables para su formación educativa.
