· Solo esperamos que Javier Alvarado no use el burladero a destajo.
· Confirmado: La sede del gobierno regional de Lima no se la llevan a Cañete, los cañetanos serán trasladados a Huacho.
· Si las cosas siguen así, dentro de poco, el baile oficial de Huacho, será el Toromata.
· No será nada raro que próximamente en Huacho se organice un festival afrohuachano .
· Por si acaso: una cosa es audiencia pública y otro teatro popular.
· Intercambio comercial: Huacho le vende a Cañete su famosa “salchicha huachana” y Cañete le vende a Huacho un “salchichón” de funcionarios cañetanos, que pronto serán famosos.
· Ex elector despistado: “Yo creí que había ganado el Toro, pero ahora veo que han ganado los búfalos”
· Éxodo gatuno: ¿Por qué será que, apenas comenzaron a llegar los cañetanos a Huacho, los gatos abandonaron la ciudad?
· Si los restaurantes, ubicados en la campiña huachana, no agregan a sus menús, potajes con carne de gato, corren el riesgo de quedarse sin clientes importantes llegados desde Cañete.
· Decima de moda en Huacho:
“Se armó Alvarado señores, /de pura gente cañetana; /en esta tierra huachana, /cuna de buenos actores”.
“En esta vida ingrata/llena de tantas penurias, /antes de meter la pata, /pensando en la acción sensata/allí está Alvarado y sus servidores, /con cantores y comparsa/como toda tristeza tiene remedio/y valiéndose de este medio/Se armó Alvarado señores”….
Con las disculpas del caso al gran decimista Álvaro Morales Charùn.
Por: Luís Guerrero