La humilde madre de Roberto López Pacheco, el peruano que murió en el accidente ferroviario de Buenos Aires, es sin lugar a dudas una Madre Coraje. Ella, luego de estar 4 años al lado de su hijo, que era su único sustento, se despidió de él y partió hacia su natal Huaral, en un viaje en bus. Viaje que se complicó por el cierre de la frontera peruano-chilena. Luego de varios días de agotador viaje, llegó a Lima, donde le esperaba la trágica noticia de la muerte de su hijo en la tragedia ferroviaria. Gracias al Cónsul del Perú obtuvo un pasaje para regresar al entierro de Roberto en Argentina.
Sólo Dios sabe el dolor que le embarga y de dónde saca las fuerzas para soportar este periplo, pues además se encuentra delicada de salud.
Esta dolida madre: Estela Pacheco, de 79 años de edad, vivía bajo la mantención de Roberto, por eso su nieta Carmen Morales, portavoz de la familia, eleva al Gobierno Argentino y al Cónsul peruano, el pedido que los beneficios económicos generados por la muerte de su tío Roberto sean para esta sufrida mujer, que de otra manera quedará en el desamparo.
Argumenta que su tío Roberto, si bien es cierto tenía una pareja en Buenos Aires, nunca llegó a tener hijos con ella y le construyó su casita, pero quien más necesita apoyo ahora, es la madre, que por la tristeza hasta corre el riesgo de un fatal desenlace.