La nutricionista Milagros Agurto agregó que “estamos fallando en nuestra alimentación en general, el sedentarismo y la inactividad”.
La comida chatarra se ha convertido en el tema del momento, todo ello a raíz de las declaraciones brindadas por el ministro de Salud, Alberto Tejada, quien se mostró a favor de aplicar un impuesto a los alimentos “poco saludables” que se han encargado de elevar los índices de obesidad.
Desde aquella declaración, no han faltado las opiniones de todo tipo, algunos avalando la propuesta del titular de salud y otros como Gastón Acurio y una serie de especialistas, quienes por diversos motivos, creen que esta iniciativa no solucionará el verdadero problema de fondo.
Sin embargo, ¿qué sabemos a cerca de la comida chatarra? El término proviene de la expresión anglosajona junk food, que significa basura y porquería desechable, haciendo referencia a los alimentos que son ricos en grasa, azucares, sodio y calorías y que pueden aportar pocas proteínas, vitaminas y minerales.
La nutricionista Milagros Agurto señaló que el tema de fondo no está en el impuesto a la comida chatarra. “El problema de la obesidad pasa por otras cosas. No se trata de la comida procesada o ultraprocesada, sino que estamos fallando en nuestra alimentación en general, el sedentarismo y la inactividad”, comentó la especialista en declaraciones a elcomercio.pe.
“Es obvio que la comida con altos niveles de grasas, sal, condimentos o azúcares será más perjudicial para la salud. Pero el problema está en el abuso de estos productos. Una hamburguesa o un pollo están bien para darse un gusto pero no podemos hacer de eso un estilo de vida”.
Agurto señaló que “se necesita una comida balanceada, donde estén presentes todos los alimentos. Uno no puede decir que come sano si solo ingiere algunas frutas. Es necesario que comamos de todo, en forma balanceada para tener una nutrición ideal.
“La comida peruana en exceso también genera sobrepeso, pero es imposible que se le ponga impuesto. Muchos turistas vienen y luego de un tiempo acá terminan gordos”. Añadió que toda alimentación irresponsable generará problemas de salud.
“El pollo a la brasa puede tener igual o más grasa que las hamburguesas, pero acá no hay coherencia. El anticucho es también pura grasa y colesterol, y el suspiro a la limeña que es un shot de azúcar directo a la vena. Pero eso no lo vamos a comer todos los días”.
Recomendó a las autoridades sincerar la información. “El Perú está acostumbrado a vivir en una cultura represiva, lo mismo sucedió con el cigarro y el alcohol. Esto debe acompañarse de una fuerte campaña de información y que no se tome el impuesto como gran solución”.
“Al igual que la desnutrición, que reposa sobre las inequidades sociales (falta de trabajo, violencia familiar, mujeres violentadas). En la obesidad, la punta del iceberg no es la comida chatarra, el impuesto no soluciona mucho”, señaló la especialista quien agregó que hay temas sociales que no se están tomando en cuenta.
Por ejemplo dijo que los niños y adolescentes crecen en una sociedad en la cual los padres trabajan y dejan solos a sus hijos. Ellos no hacen ejercicios, comen cosas que le gustan y que no son nutritivas. “Eso produce obesidad. Se pretende sustituir el tiempo con regalos y comida”.
“Bajo ese criterio hay que clavarle un impuesto al televisor y a la computadora que hace que nuestros chicos sean sedentarios y no hagan ejercicios”, finalizó.,