Por: José Ramos Casazola
Existen personas malintencionadas, agoreros de tempestades, que no creen en el Proyecto del Parque Industrial Sol Perú, dudan de la veracidad de su Presidente el valiente Segundo Menor y llenan de diatribas, calumnias e infamias a sus dirigentes; estos personajes allegados al alcalde Uribe me hacen recordar al apóstol Tomás, cuenta San Juan en el nuevo testamento lo siguiente “Pero Tomás llamado Dídimo, uno de los 12 apóstoles, no estaba con ellos cuando Vino Jesús. Entonces los otros discípulos le decían hemos visto al señor. Pero él les dijo Si yo no veo en sus manos, la marca de los clavos y si no meto mi dedo en la marca de los clavos y si no meto mi mano en su costado no creeré jamás”, por eso se le atribuye la frase. “ver para creer”, (San Juan.Cap.20 versículo 24 al 29).Ocho días después, sus discípulos estaban dentro otra vez y Tomás estaba con ellos y aunque las puertas estaban cerradas, Jesús entró se puso en medio y dijo: ¡Paz a vosotros¡ luego dijo a Tomás pon tu dedo aquí y mira mis manos, pon acá tu mano y métela en mi costado y no seas incrédulo sino creyente. Entonces Tomás respondió y le dijo ¡Señor mío y Dios Mío¡ Jesús le dijo ¿Porque me has visto, has creído? ¡Bienaventurado los que no ven y creen!.
Los periodistas libres de Huaral, que no han hipotecado su consciencia, estuvieron en el Parque Industrial Villa El Salvador y comprobaron in situ la estrecha relación que existe entre los empresarios de dicho parque y los empresarios del futuro PARQUE INDUSTRIAL SOL PERU de la variante de Pasamayo, en dicha visita quedaron deslumbrados, por la forma como transformaron un arenal, en el emporio que es actualmente dicho parque, donde se industrializan productos de carpintería, ebanistería, textiles, calzados entre otros.
Personalmente conozco el parque industrial de Villa El Salvador y por esas razones desde un inicio, siempre he apostado por que se haga realidad el parque industrial de Sol Perú, en una perfecta sinergia entre la iniciativa privada y el Gobierno Local y Regional, estas tres entidades tienen que converger, en el objetivo común de dar empleo y potenciar nuestra economía para que la provincia de Huaral, no solamente sea una provincia netamente agrícola y comercial, sino que tenga potencial agroindustrial y pueda otorgarle el valor agregado a productos, con fines de exportación.
¿Cual debería ser el rol de los tres niveles de gobierno, en el proyecto del Parque Industrial Sol Perú?
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Los gobiernos locales, el Gobierno Regional y Gobierno Central, deben tener un rol promotor de esta gran iniciativa privada:
Municipalidad Distrital de Aucallama.- Iniciar sin temor alguno el proceso de asociación pública privada con la Asociación Sol Perú, para darle viabilidad al proyecto, que sería después de Villa El Salvador, el segundo ejemplo de lo que puede hacerse a través de la unión entre el estado y la iniciativa privada. El alcalde de Aucallama es un hombre inteligente y es empresario, sabe que la iniciativa privada es el motor del desarrollo y que el estado solo debe tener un rol promotor y regulador, Aucallama ganaría mucho con este parque industrial, tanto a nivel de su economía como de su desarrollo como distrito, sobre todo teniendo en cuenta el estigma del Penal, es mucho mejor que conozcan a Aucallama Por su Parque Industrial que por el penal.
El Gobierno Regional de Lima.- Iniciar el proceso de conformidad con la Ley Nª 28183 Ley de Parques Industriales y su reglamento aprobado por el Decreto Supremo 004-2011 Produce, por el cual el Concejo Regional debe hacer suyo este proyecto, y tal y conforme lo manda el Reglamento dictar las normas que sean menester, para el objetivo de tener el primer parque industrial de La Región. El Gobierno Regional de Lima que, muy poco hace por Huaral y el norte, tendría la oportunidad para hacer realidad un proyecto, que no demandaría egresos en su presupuesto, sino todo lo contrario solamente tendría que darle el marco legal adecuado, para ello debe de una vez por todas asumir las competencias especificas previstas en el literal N) del art 51 de la Ley Orgánica de Regiones 27867 otorgadas en el proceso de transferencias de funciones del gobierno central al Gobierno Regional.
El Gobierno Central.- Terminar con la política del perro del hortelano y permitir que la iniciativa privada pueda otorgarle rentabilidad a terrenos eriazos que durante miles de años no han tenido ninguna explotación económica y que resultan onerosos para el estado, lo que debería hacer la Superintendencia de Bienes Nacionales, lejos de estar enjuiciando a Segundo Menor y a la Asociación Sol Perú, es buscar un mecanismo para otorgarle en venta a quienes jurídicamente están en posesión pacifica pública e ininterrumpida durante más de cinco años y que por lo tanto tienen derecho preferencial en la adjudicación en venta de dichos terrenos. La superintendencia tienen que entender que el proyecto tiene un alto contenido social y un gran efecto multiplicador sobre la economía de la provincia, tanto en generación de empleo, como en inversión, por lo que deben actuar con visión de futuro y no de una manera burocrática, resulta absurdo denunciar por usurpación, mejor es otorgar en adjudicación a quienes ya están invirtiendo en dichos terrenos eriazos.
La sociedad Civil.- A través de los colegios profesionales, las pequeñas empresas, asociaciones, empresarios, cámaras de comercio, sindicatos y otros, deben fomentar la participación de los ciudadanos apoyando decididamente este proyecto.
Omito deliberadamente a la Municipalidad Provincial de Huaral, ya que mientras esté el Dr. Jaime Uribe como alcalde y mi colombroño Juan José Valencia como Gerente General, nunca van a apoyar este proyecto y pedirles que promuevan la generación de empleo es como pedirle peras al olmo o agua a las piedras, esperamos todos los huaralinos, que el alcalde sea suspendido o revocado, y el pernicioso gerente defenestrado, para iniciar las gestiones con los nuevos funcionarios y poder hacerles entender las bondades del proyecto y lo beneficios que trae consigo para los intereses de Huaral.
El sol sale para todos, es un viejo adagio, lo he mencionado como titulo del presente artículo, como una metáfora de lo que significa el Proyecto sol Perú, la posibilidad que todos los ciudadanos de Huaral Aucallama y el norte chico podamos recibir una pequeña luz de ese gran proyecto que es sol Perú
