Testimonios conmovedores. La periodista Sol Macaluso de ‘El programa de Ana Rosa’ ha pasado las últimas tres semanas en Ucrania narrando todo lo que está aconteciendo en dicho país.
Sin embargo, a pesar que la guerra con Rusia era algo probable, no pensó que fuera a sorprenderla allí y que, de manera repentina, tuviera que huir del país en el que estaba trabajando.
La joven reportera detalló a través de una breve entrevista televisiva, sin poder contener las lágrimas, que su camarógrafo le ha pedido que se lleve a su hija pequeña con ella, para que así él pueda regresar a Kiev y sumarse a las tropas ucranianas.
UCRANIA. “Por favor llévate a mi hija y hazte cargo de ella, que no le falte nada”. Conmovedor relato de la periodista española Sol Macaluso. pic.twitter.com/GC5xN6f8Qg
— Liliana Franco (@lilianaf523) March 1, 2022
“Disculpen, no puedo evitar las lágrimas. Me conmueve lo que él me pidió, pero quiere tomar las armas y luchar contra los rusos para defender su país”, explicó llorosa Sol Macaluso.
Del mismo modo, la periodista resaltó el vínculo que se ha creado con sus compañeros y lo calificó de una relación increíble: “los conozco desde hace más de un mes. Hemos compartido todo el día de información y es muy duro que se tengan que quedar a defender a su país y dejar a su familia”.
Aceptó el pedido de su compañero
Entre lágrimas, Sol reveló que aceptó la propuesta de su compañero y se llevará a la niña y cuidará de ella como si fuera su propia hija, hasta que su colega retorne.
“Es mi familia ahora. Es mi hermana. Esa es justamente la parte más dura. Uno se compromete, pero no sabe hasta cuándo. Yo hablé con mi familia y nuestro equipo de trabajo en Madrid”, confesó con la voz entrecortada.
“El tiempo que haga falta y lo que haga falta. Nosotros ahora somos una familia numerosa y grandiosa de personas increíbles. Jamás la dejaremos sola, nunca le faltará nada”, añadió.
El camarógrafo deberá regresar en busca de su esposa, quien se encuentra a cuarenta kilómetros de Kiev, y a sus padres, que están ubicados en un refugio, pues se negaron a abandonar la capital ucraniana.
