El ministro del Interior, José Elice, dijo que la Policia Nacional del Perú (PNP) ha destinado más de 3000 efectivos con la finalidad de asegurar que las marchas del fin de semana en Lima se desarrollen de forma pacífica.

“Frente a las marchas y manifestaciones convocadas en la ciudad de Lima para este fin de semana por simpatizantes de las dos organizaciones políticas que compitieron en la segunda vuelta electoral, la Policía Nacional del Perú (PNP) ha destinado más de tres mil efectivos entrenados en el control de multitudes con la finalidad de asegurar que estas movilizaciones se desarrollen en forma pacífica y sin interrumpir el proceso de vacunación”, señaló.

Manifestó que “la Policía Nacional del Perú continúa trabajando para conservar el orden y la integridad de Lima y de todas las ciudades del Perú y no hará excepción alguna durante las movilizaciones de este fin de semana”.

En ese sentido, también refirió que “se está coordinando con el alto mando de las Fuerzas Armadas para, en la eventualidad que se necesite el apoyo de las FF.AA., estas concurran en el control del orden interno”.

Indicó que “no se permitirá que los manifestantes utilicen instrumentos que podrían eventualmente causar daños personales”. “Asimismo, se actuará con firmeza en el uso racional de la fuerza para controlar manifestaciones que se puedan tornar violentas”, agregó.

“El primer grado de presencia de la Policía es su presencia, el segundo es el diálogo con las personas que están movilizándose si es que se exceden en el uso de su derecho de expresarse en la calle. Después, recién, se empieza a recurrir de manera gradual al uso de diferentes mecanismos disuasivos para controlar estas manifestaciones cuando se salen de control. Él uso de gases lacrimógenos, el uso de perdigones de goma, etc., sin llegar al uso de armas letales, que están permitidas en situaciones extremas que esperamos que no sucedan”, detalló.

Además, exhortó a quienes lideran estas manifestaciones “a colaborar para que estas se desarrollen en un clima de paz y tranquilidad, sin enfrentamientos, sin desmanes, sin actos de violencia que afecten a terceros o, más aún, interrumpan el proceso de vacunación”. “Eso no lo vamos a permitir”, añadió.