Un equipo de jóvenes investigadores peruanos, diseñó un sistema de diagnóstico que utiliza energía solar para su funcionamiento. Dicho proyecto permite la detección de la COVID, en un tiempo menor a las pruebas moleculares estándar. Además, puede diagnosticar otras enfermedades infecciosas como la malaria, el dengue, la tuberculosis y la leptospirosis.
Se trata de un mini laboratorio móvil capaz de llegar a las zonas más alejadas donde no hay electricidad y realizar hasta 200 pruebas de detección en 6 horas. Cuenta con un sistema que permite transformar la energía solar en eléctrica.
Jean Poll Alva, egresado en Ingeniería Ambiental por la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM), y Ruddy Cabrejos, egresado en Ciencias Físicas por la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), unieron sus conocimientos y crearon esta innovadora alternativa.
Su investigación ha sido avalada por pares científicos y publicada en la revista internacional Environment, Development and Sustainability, indexada en Scopus y Web of Science, y así también en la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.