La oposición venezolana buscará en la protesta mundial que convocó para este sábado manifestarse contra el Gobierno y las elecciones presidenciales de mayo, tras un día en el que fue detenido el exministro Miguel Rodríguez Torres, un crítico del Ejecutivo de Nicolás Maduro, del cual formó parte.
El exjefe del Ministerio del Interior está acusado, según un comunicado del Gobierno, de planificar «acciones criminales» en las que se «incluían actos armados y conspiraciones» contra la Constitución.
El que fuese director del servicio de Inteligencia bajo la presidencia de Hugo Chávez (1999-2013) y titular del Interior con Maduro, «estaba siendo requerido por la justicia» por estar «incurso» en «conjuras y complots que perseguían la intención aviesa de atentar contra la unidad monolítica» de las Fuerzas Armadas.
El documento apuntó que las «acciones criminales planificadas» por Rodríguez Torres «y sus cómplices incluían actos armados y conspiraciones» contra la Constitución venezolana.
Rodríguez Torres fue detenido por el Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) al finalizar su breve presentación en un evento en Caracas de la organización política que coordina, Movimiento Amplio Desafío de Todos, sin que se conozca el lugar al que fue trasladado.
«Se negaron a mostrar la orden de captura cuando le fue solicitada», dijo a periodistas el dirigente de su organización, César Mogollón.
«Si esto le está pasando a un líder nacional de nuestro movimiento, ¿qué queda para nuestros dirigentes chavistas que son críticos de un gobierno dictatorial como el de Nicolás Maduro?», añadió.
Rodríguez Torres, que fue separado del Gobierno de Maduro en 2015, anunció en febrero que la Contraloría General le impuso una inhabilitación política por un año, impidiéndole de esta forma participar en las elecciones presidenciales del 20 de mayo, una decisión que calificó entonces de «falso positivo» para sacarlo de la arena política.
El disidente chavista se unía así a otras figuras de Venezuela y también inhabilitadas, como el dos veces candidato presidencial Henrique Capriles y el líder de Voluntad Popular bajo arresto domiciliario, Leopoldo López, ambos reconocidos opositores.
Estas inhabilitaciones fueron uno de los motivos que llevó a la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), de la que los dos últimos forman parte, a no participar en unos comicios que consideran una «farsa» y bajo condiciones que, asegura la coalición, carecen de transparencia.
Ante esta situación, el recién creado Frente Amplio Venezuela Libre llamó la semana pasada a una protesta mundial para este fin de semana, una convocatoria con la que buscarán «crear conciencia» de lo que ocurre en el país caribeño, apuntó el dirigente opositor Ramón Guillermo Aveledo en el canal privado Globovisión.
«Habrá una jornada mundial en todas partes para hacer despertar en la opinión pública mundial la conciencia de la verdadera naturaleza de lo que está en juego en Venezuela», dijo el que también fuese exsecretario de la MUD.
Aveledo no ofreció detalles de la manifestación, pero confió en que la actividad será seguida por los venezolanos que han salido del país en los últimos años en medio de la crisis económica, y que según estimaciones de la Organización Internacional para las Migraciones son al menos 1.6 millones.
Defendió que el expresidente del Parlamento venezolano Julio Borges ha estado en las últimas semanas «viajando, conversando, explicando» la crisis venezolana en el exterior para impulsar «una especie de frente amplio internacional», gira por la que ha sido criticado e insultado por Maduro y otros altos cargos oficialistas.
La Republica