Madrid. El cuerpo de Gabriel Cruz, un niño de ocho años, cuya desaparición a fines de febrero conmocionó a toda España, fue hallado el domingo en la maletera del automóvil de la pareja del padre, anunció el ministerio del Interior.
La búsqueda del pequeño Gabriel Cruz, desaparecido el 26 de febrero en un pueblo cercano a Almería, en el sudeste del país, había movilizado a un millar de agentes, bomberos y voluntarios.
«La guardia Civil, en la mañana de hoy, ha detenido a la pareja del padre de Gabriel cuando transportaba el cadáver del pequeño en el maletero del coche» declaró el ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido.
La detenida se llama Ana Julia Quezada, la pareja del padre que incluso había participado de manera activa en la búsqueda de Gabriel.
De acuerdo con el diario «El Mundo», Ana Julia Quezada Cruz, a quien la Guardia Civil interrogó el pasado miércoles, fue detenida cuando transportaba el cadáver del pequeño en la maletera de su auto desde un pozo en el que se encontraba hasta otro lugar donde pretendía esconderlo.
Fue precisamente ella la que el fin de semana pasado halló cerca de una depuradora la camiseta blanca interior que llevaba el niño el día de su desaparición. En ese momento fue puesta en la mira de los agentes porque la zona ya había sido rastreada con anterioridad y no se encontró nada.
Gabriel Cruz estaba en casa de su abuela, en la localidad de Las Hortichuelas, cuando salió para ir a jugar a casa de un amigo, no lejos de allí. No fue visto desde entonces.
Tras su desaparición, la policía y voluntarios han rastrillado las áreas rurales de los alrededores, a pie y a caballo, con helicópteros y drones, tratando de localizarlo.
El jefe de gobierno español Mariano Rajoy tuiteó este domingo: «Comparto con todos los españoles el dolor por la pérdida de Gabriel».
De acuerdo con «El Mundo», Ana Julia era la principal sospechosa para la Guardia Civil. Los agentes no habían procedido a detenerla antes por si el niño se encontraba con vida, según fuentes de la investigación. La detenida estaba transportando el cadáver por miedo a que fuera encontrado en el pozo en que se encontraba durante alguno de los innumerables rastreos organizados durante estos días.
Las sospechas se centraron en ella después de que fuera quien hallara la camiseta blanca que llevaba el niño puesta cuando desapareció. La camiseta fue encontrada entre unos matorrales, aproximadamente a unos cuatro kilómetros del lugar donde se perdió el rastro del pequeño.
De hecho, Ana Julia resultó herida al caer por el terraplén donde se encontraba la prenda. Fue ella la que llevó la camiseta hasta el puesto de mando avanzado de la Guardia Civil en Las Negras. Cuando la encontró Ana Julia se encontraba paseando con el padre del pequeño.
Las primera pistas
El cuerpo de Gabriel fue encontrado después de casi dos semanas de angustiosa búsqueda en la que participaron más de 2.600 voluntarios y casi 1.500 profesionales.
En un primer momento la investigación parecía apuntar a un vecino de una localidad cercana a Níjar, que fue detenido dos días después de la desaparición del pequeño por incumplir una orden de alejamiento respecto a la madre de Gabriel, a quien acosaba desde que la conoció durante una carrera popular.
El hombre acababa de ser condenado, el pasado febrero, a seis meses de prisión por quebrantar esa orden e ingresó en la cárcel el 3 de marzo, pero no por la desaparición de Gabriel, que siguió siendo buscado.
Unas 8.000 personas acudieron el viernes a la llamada de los padres del pequeño para concentrarse en Almería y pedir que su hijo regresara a casa, a la que asistió también la ahora detenida.
Allí su madre, Patricia, pidió respaldo a la iniciativa del colegio del niño para que miles de «pescaítos» -como llamaba a su hijo cariñosamente por su pasión por los peces y el mar- ayudasen a que el pequeño volviera a casa.
La noticia del hallazgo del cadáver del pequeño ha conmocionado a la sociedad española, que había inundado las redes sociales con cientos de dibujos de peces.
Fuente: Con información de AFP / EFE