El ex agente de serenazgo de Huaral, Tamara Cueva, dijo que luego de laborar por 7 años y medio, fue despedido arbitrariamente junto a otros compañeros, habiendo sido reemplazados por gente joven e inexperta que carece de experiencia y capacitación para este trabajo.
Dijo que pese al tiempo de servicios prestados, no se les ha reconocido ningún beneficio y que los han despedido sin tener ninguna razón laboral para hacerlo, ya que no tenían ningún memorándum en contra. Además les dijeron que era por recorte presupuestal pero a los 3 días contrataron personal nuevo.
Junto a otros compañeros despedidos dijeron que intempestivamente les cerraron la puerta y no los dejaron ingresar al trabajo, sin darles ninguna documentación ni aviso de despedido.