Han pasado cuatro meses desde la desaparición de Patricia Liberto, la docente que fue vista por última vez el 13 de febrero, día del trágico accidente en el Puente Chancay. Desde entonces, su familia no ha dejado de buscarla, aferrándose a la esperanza en medio del dolor.
Este viernes, los familiares de Patricia regresaron al lugar del siniestro, recorriendo nuevamente la zona donde ocurrió el colapso del puente, estructura que aún no ha sido retirada, pese al tiempo transcurrido. Su objetivo: hallar el cuerpo de la profesora para brindarle una sepultura digna y cerrar, al menos en parte, el ciclo de angustia que atraviesan desde hace meses.
La familia denuncia el abandono de las autoridades y exige respuestas concretas, así como el retiro definitivo de los escombros del puente, cuyo estado representa no solo un símbolo del dolor, sino también un peligro latente.
La ausencia de Patricia deja un vacío profundo en quienes la amaron. Solo queremos encontrarla y despedirla como merece”, expresó uno de sus familiares visiblemente afectado
