En horas de la mañana de este viernes 6 de diciembre, el cuerpo de un niño de solo 11 años de edad fue encontrado sin vida en el río Rímac, cerca al concurrido parque La Muralla, en el Cercado de Lima. El menor fue reportado como desaparecido el 30 de noviembre.
El niño fue encontrado con la misma ropa que usaba cuando fue visto por última vez en la cuadra 4 del jirón Amazonas: pantalón rojo, zapatillas blancas con negro y una camiseta del color morado.
El cuerpo del menor fue reconocido por su madre, quien indicó que tenía una mancha negra en una de sus piernas. Entre lágrimas, la mujer contó que llegó a la comisaría de San Andrés para denunciar la desaparición del menor, pero se lo negaron. La progenitora indicó, además, que su pequeño se encontraba en tratamiento con medicamentos porque atravesaba por depresión.
«Cuando yo pedí ayuda a la comisaría de San Andrés, no me ayudaron. Solo me dijeron que ¿por qué lo dejaste salir si está enfermo?», declaró en Panamericana TV.
Se presume que el cuerpo del niño habría sido arrastrado por la corriente del Rímac. Efectivos de la Policía Nacional del Perú (PNP) cercaron la escena del crimen mientras peritos de criminalísticas realizaron las diligencias de ley y señalaron que los restos habrían estado entre 4 a 5 días en el agua.