Una humilde familia de la zona de Las Flores, en Retes, enfrenta un intento de desalojo en medio de un complicado proceso judicial por un terreno heredado. Un joven de la familia afectada relató que el conflicto surgió tras un juicio iniciado por su tío Raúl Pariasca Colán, primo de su padre fallecido Félix Colán Paz, quien reclama la propiedad del terreno de 90 metros cuadrados donde actualmente reside.
Según el joven, su padre heredó el terreno de su abuelo, quien dejó un testamento acreditando la herencia. Sin embargo, el juicio favoreció a su tío debido a que, durante el proceso, el joven no pudo presentar todos los documentos, ya que se encontraba trabajando en Lima.
La situación se agravó cuando llegaron varios efectivos policiales al lugar, quienes, según el joven, lo amenazaron con desalojarlo de cualquier forma si no se retiraba voluntariamente. Ante la presión, el joven aseguró haber amenazado con encender un balón de gas para evitar el desalojo, pues afirma que la propiedad le pertenece y que ha mostrado documentos que lo acreditan, aunque no fueron tomados en cuenta por su tío y el abogado, quienes llegaron sin documentos que respalden el desalojo.
El joven también acusó a su tío, Raúl Pariasca Colán, de intentar falsificar documentos que lo acrediten como propietario de una parcela más grande, de 1 hectárea y 3,803 metros, ubicada en el fundo de Retes, Av. Victoria – lote # 16. En estos documentos, Raúl Pariasca asegura adquirir dicho terreno, mediante una supuesta compra-venta realizada en 1996 al antiguo dueño Félix Colán Maguiño, abuelo del joven involucrado. Indicó que su tío manifiesta haber donado el terreno a la Asociación de Vivienda Las Flores de Retes, a título gratuito pero para los efectos del pago de derecho de inmueble se le da un valor real de 140 mil nuevos soles. Por lo que alega que su abuelo fue quien vendió el terreno a la Asociación y no fue donado por su familiar. Los vecinos también dieron fe de las versiones del afectado.
Finalmente el joven contó que la intervención policial no se concretó cuando los medios de comunicación llegaron al lugar, lo que ha permitido que su familia continúe ocupando el terreno mientras espera una resolución judicial definitiva que ponga fin a esta disputa por la herencia.