El presidente del Centro Poblado Túpac Amaru, Wagner Trujillo, aseguró en una entrevista con Huaralenlinea, respecto al agua que el alcalde chancayano pretendió llevar a Pampa Libre: “No se puede actuar al caballazo, yo te pido esto y me lo llevo y ocurrió eso. La población se sintió ofendida porque ni siquiera le preguntaron que si en verdad era factible compartirlo y que se lo lleven.
Lo peor es que eran 8 pulgadas y por gravedad, en forma constante. Imagínate, llevarte 8 pulgadas de agua, de un punto tan bonito que es la Esperanza Baja, tan verde, tan productivo, y con 8 pulgadas llevártelo al puerto; el pretexto era Pampa Libre.
También estamos enfocados en el proyecto de agua y desagüe de Túpac Amaru y otros 3 pueblos, cuyo expediente técnico está en un 90 %. La fuente de Túpac Amaru, pertenece a Túpac Amaru, porque lo construyeron sus pobladores y compraron sus bombas y accesorios.
Lo que sostiene el consultor, el proyectista, es que quiso tomar como fuente común el pozo de Túpac Amaru, lo cual en una Asamblea decidió que no se usara el pozo de Túpac Amaru. Entonces nosotros nos opusimos al consultor para que los 4 pueblos que quedamos, con Cerro Cenizo, Jecuán y Real Perú, que ya no se iba a tocar este pozo y nosotros íbamos a asumir el compromiso de comprar un terreno, para que pueda ser usado en el proyecto.
Una vez que se solucione el tema del terreno, Túpac Amaru ya no va a entregar, no va a donar y va a quedar para Túpac Amaru, exclusivamente, entre los 4 pueblos vamos a comprar un terreno y lo vamos a entregar en donación al Ministerio, para que ellos puedan ahí desarrollar el proyecto de agua y desagüe.
La JAS tiene un tema importante, pues ha sido elegido su junta directiva, de manera absoluta y unánime. No existe una condición para que nos hagan el proyecto y nosotros entreguemos el agua. El proyecto de agua y desagüe es netamente para los 4 pueblos, no tocamos el tema de Pampa Libre, porque no nos compete.
Tenemos una presidenta de los 5 pueblos que está encargada de ver el tema de Pampa Libre, de la lucha social, en el que Túpac Amaru participa como un socio activo, preocupados por la situación del líquido elemento. En ese aspecto no tiene nada que ver nuestro proyecto de agua y desagüe que nos merecemos, porque tenemos 53 años de fundados y vivimos todavía sin saneamiento.
Mientras no exista un plan adecuado que se ajuste a nuestra realidad y nuestra situación, está bien conversar y hablar. Acá primero han actuado y después quieren hablar. Se tienen que tender nuevos puentes y conversaciones de qué sucedió. También tienen que ver nuestras inquietudes, nuestros requerimientos: Qué cosa se quiere hacer para la Esperanza Baja, que tiene igual edad que Pampa Libre.
No podemos hacer la atención porque es Chancay o tal vez tengan un alcalde hiperactivo. Tal vez el pretenda hacer las cosas así. Nosotros somos un pueblo pacífico, pero cuando nos quitan no nos vamos a quedar tranquilos. Hay que ser consecuentes con nuestra realidad; algo que no tenemos cómo se lo podemos entregar.
En la última reunión con el Ministerio de Vivienda, cuando se quiso hablar de Pampa Libre, fuimos claros en afirmar que fuimos a hablar el tema de nuestro proyecto, no de Pampa Libre. Hay intenciones de tendernos puentes, pero explicamos que lo hicieron de mala manera, porque entraron al caballazo, trabajaron de noche, no había seguridad en su trabajo, dejaron todo hecho un desastre y la empresa que lo hizo dejó todo mal, y en ese tema tenemos una sola idea. Se tiene que conversar con la directiva”, argumentó.