Una condena de líderes latinoamericanos, se viene generalizando, tras la irrupción de fuerzas policiales ecuatorianas en la Embajada de México en Quito, con la finalidad de detener a Jorge Glas, un asilado político.
Este incidente, que viola los principios básicos de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, representa un atentado contra la soberanía y la integridad de las representaciones diplomáticas, según han señalado las distintas cancillerías regionales.
El apoyo a México y a su presidente, Andrés Manuel López Obrador, no se hizo esperar. La comunidad internacional ha subrayado la importancia de mantener el respeto por las normativas internacionales que garantizan la seguridad y la inviolabilidad de las misiones diplomáticas en todo el mundo.
Varios mandatarios de la región, como Luiz Inácio Lula da Silva de Brasil, Nicolás Maduro de Venezuela, Gabriel Boric de Chile, Gustavo Petro de Colombia y Luis Arce de Bolivia, han manifestado su firme rechazo a la violación de la embajada mexicana y destacaron el acto como una transgresión a los acuerdos internacionales y una falta de respeto a la integridad territorial de México.
El operativo policial contra la embajada de México en Quito, ha sido calificado como un acto de barbarie nunca antes visto en América Latina. “Ecuador violó brutalmente el Derecho Internacional, asaltando la Embajada de México en Ecuador y secuestrando a un asilado político, así reconocido por el Gobierno mexicano”, expresó Nicolás Maduro desde Venezuela.
