Después de haberse encontrado muy grave a raíz del COVID, el coordinador de APP de la provincia de Huaral, contó su experiencia de lucha contra el coronavirus: “Pasé momentos muy difíciles que nunca imaginé.
Ha sido una experiencia muy fea en mi vida. Llegó un momento en que ya no podía respirar.
Con la neumonía, se me cerraron los pulmones. Agradezco a Dios por esta segunda oportunidad de vida que me está dando. Legué a saturar 80. Ya no tenía respiración. Fui a varias clínicas en Huaral, pero ya no me atendieron. Me dejaron afuera.
Agradezco a mis padres, a mi familia, a mi hermana que es enfermera, al médico que estuvo conmigo las 24 horas, a mis amigos, que me apoyaron moralmente.
No había oxígeno por ninguna parte. Mi familia consiguió un concentrador de oxígeno en Lima, con eso pude luchar las 24 horas. Sin ese generador no hubiera podido vivir”, manifestó.
Indicó que nuevamente está en su trabajo político con APP, señalando que en su partido no hay gente a la que se le señale con el dedo y que viene organizando las bases juveniles a nivel de cada distrito de la región.