La joven señora Rubí Moya, de 26 años de edad y que vive en el sector Villa Paraíso, no imaginó que sus dolores de parto le sobrevendrían mientras cumplía la Inmovilización Social Total de ayer Jueves Santo.
Ante los inminentes síntomas del parto y no habiendo ningún tipo de movilidad para trasladarse al hospital San Juan Bautista de Huaral, tuvo que ser auxiliada por agentes de Serenazgo, quienes brindaron su apoyo para trasladarla al nosocomio, donde quedó internada en el área de ginecología.
