Hoy es el Día Mundial del Parkinson , una enfermedad neurodegenerativa que se manifiesta principalmente por el temblor en manos y pies y que, según el Ministerio de Salud, en el Perú afecta a unas 30 mil personas, registrando 3,000 nuevos casos cada año.
Para conocer más de esta enfermedad conversamos con el médico Helard Miranda, neurólogo de la clínica Delgado, quien indicó que, aunque esta enfermedad se presentaba usualmente entre los 50 y 60 años, cada vez es más común ver pacientes diagnosticados a los 20 o 25 años.
El experto refirió que algunos síntomas iniciales, como los trastornos de sueño, la depresión y la pérdida olfativa pueden avisar de forma temprana que se presentará la enfermedad.
¿Cuáles son los primeros síntomas de la enfermedad?
En realidad el Parkinson no empieza cuando una persona tiene el componente motor, es decir que está rígido, le tiemblan las manos o está lento. Empieza muchos años atrás, aproximadamente 20 o 30 años antes. Pero es tan lento que cuando aparece el componente motor ya avanzó bastante. El mal aparece con síntomas como trastornos del sueño REM, que consiste en que el paciente actúa su sueño en la noche, es decir estando dormido patea, se mueve, chilla, etc., y generalmente los sueños son violentos e intensos.
¿Estos síntomas ya nos avisan de que el Parkinson se presentará en el futuro?
Toda esta sintomatología se denomina los síntomas pre motores y se presentan años antes de que se presente el componente motor. Sin embargo, no se presenta en todos los pacientes, aunque sí en un porcentaje bastante alto. Pero es recién cuando se presenta el componente motor que la enfermedad se puede diagnosticar.
¿Qué ayuda a controlar esta enfermedad?
Lo que se sabe es que aquellas personas que mantienen un estilo de vida saludable y hacen mucho ejercicio tienen progresiones bastante menores de los que no se cuidan, o de los que no se tratan la depresión, etc.
¿Cómo se hace el diagnóstico del Parkinson?
El diagnóstico del Parkinson es clínico, quiere decir que se hace un examen médico neurológico para determinar la enfermedad. El diagnóstico de certeza total se hace por patología, pero para ello hay que esperar que el paciente muera y se realiza un corte del cerebro.
Una vez que la persona es diagnosticada ¿qué debe hacer?
Lo primero es acceder a información clara de lo que va a ocurrir: tiene que tener claro que esta enfermedad no tiene cura, que los que hablan de curas milagrosas son estafadores, pero que ser diagnosticado con Parkinson no es una sentencia de muerte porque hoy en día hay excelentes herramientas terapéuticas para el tratamiento.
Actualmente contamos con nuevos fármacos, tratamientos modernos y métodos de rehabilitación que disminuyen los sufrimientos y que pueden dar a las personas una vida prácticamente normal. Entre ellas está la cirugía de estimulación cerebral profunda, una intervención quirúrgica que consiste en la implantación en el cerebro de un dispositivo que ayuda a los pacientes a controlar el temblor, la rigidez, la lentitud de movimiento y la dificultad para caminar.
¿Todos los pacientes pueden ser candidatos a esta cirugía?
No. Es para pacientes con diagnóstico de la enfermedad, a quienes, después de cinco años de tratamiento, los fármacos ya no le funcionan, y para los que pasen una evaluación neuropsicológica para determinar que no padecen de los trastornos cognitivos que produce el Parkinson. Si el paciente ya tiene demencia, la cirugía está contraindicada porque eso empeoraría su condición.