Un insólito caso de violación se produjo en la provincia de Santiago del Estero, en Argentina, luego de que la hermana de dos adolescentes de 13 y 14 años, denunciara que su vecina los emborrachó para luego abusar sexualmente de ellos.
“Ya estoy en casa, pueden venir nomás”, decía el mensaje enviado por la denunciada a los menores de edad, como símbolo de alerta para que la visiten a su casa, donde ella les daba alcohol y drogras para aprovecharse de ellos.
Ninguno de los chicos había revelado la situación pero, cuando la joven descubrió el llamativo mensaje en uno de los celulares, los detalles salieron a la luz. Uno de los menores sostuvo que la vecina les daba dinero para que fueran a comprar bebidas alcohólicas, los obligaba a tomarlas y después les bajaba los pantalones para manosearlos.
En la denuncia, manifestaron que en una oportunidad ellos intentaron negarse a las prácticas sexuales y la acusada se enojó y les pegó con «golpes de puño» en la cara. La investigación quedó en manos de la fiscalía.
Atv