Mientras el presunto asesino del suboficial Acnner Luzón Jiménez camina libre por las calles, su familia llora su muerte. El efectivo fue baleado el pasado 14 de enero tras frustrar un asalto en el Asentamiento Nueva Esperanza, en el departamento de Piura.
Su deceso, además de dejar desconsolados a sus todas las personas que lo conocieron y a la institución policial, ocurre el mismo día que los jueces de la Tercera Sala Penal de Piura decidieran otorgarle libertar a uno de los sujetos implicados en el asalto.
El agente tuvo casi un mes de lenta agonía en el Hospital de la Policía de la ciudad de Lima, luego que el impacto que recibió por parte de sus asesinos comprometiera el hígado, páncreas y estómago.
Acnner Luzón fue sometido a una operación de emergencia, tras sufrir una infección generalizada. Al parecer, no resistió la cirugía y dejó de existir por la tarde.
Indignación
Los magistrados revocaron la prisión preventiva de nueve meses por comparecencia restringida a su presunto asesino, identificado como Yerson Alexander Domínguez Martínez.
Esta decisión causó indignación, por parte de los integrantes de la Policía, así como de algunos abogados. Según fuentes del Poder Judicial, la decisión de los jueces se basó en que la pericia de absorción atómica dio negativa.
Es decir, Yerson Domínguez no habría disparado contra el agente. No obstante, sus familiares exigieron justicia para y solicitaron apoyo al Ministerio de Interior para que el caso no quede impune.