El cardenal António Marto sostiene que las acusaciones al papa Francisco de conocer los casos de abuso sexual son parte de una campaña orquestada por los sectores ultraconservadores de la Iglesia católica.
El cardenal de Fátima, António Marto, salió en defensa del papa Francisco. Según declaró el religioso portugués para El Observador, hay una campaña de desprestigio orquestado por el sector ultraconservador. El también obispo de Leiria-Fátima, le brindó su respaldo al líder máximo de la Iglesia católica. «Todos los obispos de Portugal son con el Papa Francisco y le muestran su apoyo en esta reforma de la Iglesia», aseguró Muro. Sin embargo, el cardenal portugués dijo que las acusaciones iban a reforzar la imagen del Papa cuando los casos de abuso sexual y encubrimiento se aclaren.
El papa Francisco ha preferido guardar silencio. Después de una acusación a través de una carta pública de 11 páginas en donde se le acusaba de conocer las denuncias por abuso sexual en el seno de la Iglesia, el Sumo Pontífice declaró a lo periodistas que lo interrogaron que prefería no comentar el asunto. Sin embargo, les hizo el llamado a investigar el material de la carta.
El cardenal Marto considera que la publicación de la carta fue estratégica, ya que se lanzó al público durante el viaje del Papa a Irlanda, donde el Sumo Pontífice se entrevistó con víctimas de acoso y vejaciones sexuales. “Ahora comienzan a llegar un montón de desmentidos sobre muchas cosas que dice el arzobispo. En primer lugar, la carta estaba preparada ya hace mucho tiempo con periodistas; unos de los Estados Unidos, otros de Italia. En concreto, el periodista Marco Tosatti, que él mismo confesó haber participado, han sido tres horas con el arzobispo para escribir texto, y dijo que se escogió el momento propio del viaje del Papa a Irlanda, señaló.
Hace cuatro días, un exembajador del Vaticano, el arzobispo Carlo Maria Viganò, escribió en una carta abierta que el papa Francisco conocía las acusaciones de abuso sexual contra McCarrick desde hace cinco años. El cardenal norteamericano McCarrick había sido señalado por varios miembros de la Iglesia de tener acostarse con seminaristas.