Por alguna razón, un gran contingente de ciudadanos huaralinos, no entiende o no quiere entender, que las calles no son un basural, menos un depósito de desmonte y menos todavía, un baño público, que a veces utilizan para miccionar y hasta defecar.
pues siguen ejecutando esta acción, día a día, que demuestra una ignorancia supina.