“Lo primero que quiero hacer es disculparme ante los peruanos porque no he explicado. Yo no he mentido. No he mentido. No soy corrupto”.
En lo que podría ser tomada como la quinta intervención pública para responder por el caso Odebrecht, el presidente Pedro Pablo Kuczynski ofreció anoche estas declaraciones y calificó como un intento de “asalto al orden democrático” el proceso de vacancia iniciado en su contra desde el Congreso de la República, por los contratos que firmó su empresa personal, Westfield Capital, con la constructora brasileña.
Y es que el mandatario llega a esta etapa luego de haber caído en previas contradicciones: el 23 de octubre envió un documento a la Comisión Lava Jato del Congreso y sostuvo que no tuvo “relación profesional ni comercial con las constructoras brasileñas”. El 14 de noviembre, vía Twitter, negó haber tenido “vínculo profesional con Odebrecht”. Recién el 9 de diciembre contó en RPP que había ofrecido servicios como asesor financiero para el proyecto Olmos, a través de la empresa First Capital, la misma que había sido contratada para tal fin por H2Olmos, empresa vinculada directamente con Odebrecht.
La cuarta explicación pública se dio tras una maniobra de la presidenta del grupo Lava Jato, Rosa Bartra, contra quien existe el pedido de otras bancadas para que deje el cargo por parcializarse con su lideresa Keiko Fujimori.
El 13 de diciembre, Bartra hizo público un documento de Odebrecht en el que se revela que Westfield Capital, la empresa personal de Pedro Pablo Kuczynski, sí había contratado con Odebrecht en el 2012.
Al día siguiente, Kuczynski salió en un mensaje a la Nación para descartar cualquier favorecimiento hacia Odebrecht cuando era ministro y premier del gobierno de Toledo y solicitó el levantamiento de su secreto bancario. Las explicaciones fueron tomadas por todas las bancadas del Congreso, salvo el oficialismo, como insuficientes.
El mandatario ofreció anoche una entrevista de una hora a los periodistas Rosana Cueva (Panamericana), Milagros Leiva (RPP), Pamela Vértiz (ATV), Pedro Tenorio (Latina) y Sol Carreño (América), como un intento de esclarecer los hechos por los cuales el Congreso ahora está a punto de vacarlo bajo el supuesto de “incapacidad moral permanente”.
Hubo entonces ofrecimiento de disculpas al país, hubo reconocimiento de que no explicó todo en su debido momento, hubo también preguntas que no fueron claramente respondidas, pero, en opinión de voces como la del ex premier Pedro Cateriano, tales vacíos no son razón suficiente para la vacancia de un presidente de la República.
Kuczynski confirmó además que Carlos Basombrío presentó su renuncia al Ministerio del Interior, pero al mismo tiempo confió en que continuará trabajando, tal como lo reiteró luego Mercedes Aráoz.
No firmé contratos
“Yo no he firmado ningún contrato con Odebrecht”, fue una de las explicaciones ofrecidas por Kuczynski. “Yo no estuve contratando con el Estado, yo he sido simplemente el accionista, no he sido el gestor de la empresa”, agregó.
De este modo, el mandatario insistió en la versión ofrecida en días previos en el sentido de que su empresa Westfield Capital fue gestionada por su ex socio Gerardo Sepúlveda.
Esto coincide con la declaración ofrecida por la empresa brasileña en una carta a La República, elemento que tendrá que ser materia de análisis en el Pleno del Congreso del jueves 21, cuando corresponda debatir la eventual aprobación de la vacancia presidencial.
Kuczynski sostuvo que tras ser nombrado ministro se alejó de su empresa Westfield Capital. “Me aparté completamente de esta empresa (…) le dije a mis trabajadores, el principal de los cuales era el señor Gerardo Sepúlveda: ustedes se ocupan, yo no tengo que ver con esto más”, contó.
“Él (Sepúlveda) no me podría reportar, porque yo no quería saber lo que estaba haciendo”, insistió.
Sin embargo, al ser preguntado por Rosana Cueva, de Panorama, sobre alguna constancia legal que evidencie tal distanciamiento, Pedro Pablo Kuczynski no dio una respuesta concreta.
En otro momento, para reforzar su versión mostró los documentos contractuales que suscribió su socio Sepúlveda, a nombre de Westfield Capital. “Aquí veo contratos por primera vez en mi vida que nunca había visto antes”, comentó, además de descartar cualquier favorecimiento a Odebrecht cuando era ministro de Estado.
“Él (Sepúlveda) nunca me pidió que hiciera una sola gestión con el gobierno”, apuntó.
Trasferencia
El mandatario, en otro momento, reconoció que hubo una transferencia de Westfield Capital hacia una cuenta personal, por el monto de 380 mil dólares, a través del Banco de Crédito del Perú.
“Los dividendos que me pagó la firma, fue un año muy bueno por inversiones que yo había hecho y presenté mi declaración jurada a la SUNAT”, declaró, al descartar que haya habido pagos efectuados al margen de la ley.
“El grueso de los ingresos no viene de asesorías, son inversiones mías que no tienen ningún conflicto con lo que pasa en el Perú (…)”, agregó, al detallar las operaciones realizadas por su empresa. “Si uno fuera corrupto, ¿haría estas transacciones bancarizadas, pagando impuestos?”, insistió el presidente.
Golpe a la democracia
“No he cometido ningún crimen, no he hecho ninguna corrupción, no he creado cuentas ficticias en paraísos fiscales”, recalcó Pedro Pablo Kuczynski, quien más bien calificó el intento de vacancia desde el Congreso de la República como un “asalto al orden democrático” de nuestro país.
“Hay un asalto al orden democrático; el fiscal (Pablo Sánchez), el Tribunal Constitucional y ahora el presidente… ¡Vamos!… Y sin un (debido) proceso”, reclamó.
“Esto es una exageración donde se está tratando de sacudir al presidente, al fiscal, a una serie de otras personas muy importantes en la vida política del Perú, para manejar el Estado sin haber elección presidencial”, apuntó.
Gabinete con sorpresas
Esta línea de intervención fue respaldada por la segunda vicepresidenta y jefa del gabinete ministerial, Mercedes Aráoz, quien hasta hace poco había optado por evitar cualquier crítica a Fuerza Popular.
(Aráoz) habló de una persecución a la Fiscalía, al Tribunal Constitucional y al presidente. “Hay crítica, destrucción y no hay construcción”, agregó, al referirse al desempeño del fujimorismo.
En Latina, Mercedes Aráoz reveló haber conversado poco con el vicepresidente Martín Vizcarra, durante este periodo de crisis. “Yo no he hablado con él (…) Hemos chateado”, dijo, al descartar la versión de una probable renuncia de Vizcarra para que ella asuma la presidencia ante una eventual vacancia.
El ministro de Defensa, Jorge Nieto, enfatizó anoche que el proceso de vacancia no cumple con las garantías del debido proceso, porque Fuerza Popular y el Apra ya han adelantado opinión. “Se ha roto completamente el debido proceso”, apuntó.
Afirmaciones
“Lo primero que quiero hacer es disculparme ante los peruanos porque no he explicado bien… Yo no he mentido, no soy corrupto… Lo que está pasando ahora es un asalto constitucional”.“Yo no he firmado un solo contrato ni he gestionado con el Estado un solo contrato”.“Hubiera sido mucho mejor si yo hubiera observado que eso se estaba haciendo… Se usó una empresa de buen nombre en la gestión. Yo era el accionista, pero muchos de los ingresos no vinieron a mí”.“Estas transacciones que fueron del señor Sepúlveda en el año 2006, 2007… ¿son causal de vacancia de este presidente en este periodo?”.“Él (Basombrío) está muy preocupado, me ha mandado una carta que yo no he aceptado y espero poder convencerlo de que se quede”.“Yo sabía que él (Sepúlveda) trataba de conseguir negocios (…). No solo con Odebrecht (…) tiene muchos clientes”.“Se está tratando de sacar al presidente, al fiscal, a una serie de personas muy importantes en la vida política (…). ¿Para qué? Para manejar el Estado sin haber ganado una elección”.
No pudo probar que se alejó de Westfield Capital al ser ministro
Varias inconsistencias se observaron durante la entrevista al presidente Pedro Pablo Kuczynski.
Una de ellas fue su afirmación de que mientras fue ministro de Economía en 2001 y luego premier en 2005, se alejó de la dirección de la empresa Westfield Capital. Sin embargo, no pudo presentar la documentación que lo demuestre. El único documento que existe señala que se alejó en 2006.
Otra cosa que aseguró fue que él no participó ni firmó ni supo de los contratos que –insistió– fueron suscritos por Gerardo Sepúlveda con Odebrecht. Pero tampoco pudo demostrarlo.
Aseguró que al alejarse de Westfield Capital, Sepúlveda no le dijo nada sobre los negocios con la constructora brasileña vinculada a casos de corrupción. No quiso responder si es su amigo, pero el día de su juramentación a la presidencia, estuvo en el balcón de invitados especiales, cerca de la primera dama, Nancy Lange.
Cuando le consultaron por qué le transfirieron dinero a su cuenta personal, sostuvo en general que se debió a las buenas inversiones que hizo, pero no pudo demostrar que no estuvieran vinculadas a Odebrecht.
Sobre la creación de Westfield Capital negó sus declaraciones dadas en 2011, señalando que se creó después del ataque a las torres gemelas.