Una gerente de la compañía peruana Graña y Montero expresó su profunda decepción por el accionar de Keiko Fujimori, a raíz del proyecto de ley aprobado por el Congreso y planteado por Karina Beteta para reformar el polémico Decreto de Urgencia 003-2017, el cual extiende el impedimento de contratar con el Estado a empresas socias de otras condenadas. En ese sentido, detalló que los intereses de la lideresa de Fuerza Popular están enfocados en obtener el poder a toda costa.
Utero.pe compartió el pronunciamiento -a título personal-,que Claudia Drago, Gerente Legal y de Asuntos Corporativos Graña y Montero, emitió en su cuenta de Facebook, en la cual da a conocer su “decepción” por el proyecto fujimorista aprobado, el cual considera que fue planteado “atendiendo sus propios intereses en lugar de los del país”.
Y es que hay que recordar que el proyecto afectará a Graña y Montero, exsocia de la brasileña Odebrecht, la cual ha afirmado que se verán vulnerados “los intereses de las empresas y sus decenas de miles de trabajadores.
“Tu proyecto de ley que de manera populista proclamaste, aduciendo que es parte de tu lucha contra la corrupción, es anticonstitucional y tumbará a la empresa. Quizás eso buscas, que 32 mil trabajadores nos quedemos sin chamba. Nosotros no tenemos quién nos mantenga. Buscas tumbar a la industria de la construcción, con eso el gobierno no tendrá cómo responder ante la Reconstrucción y los Panamericanos, ¿qué bueno que quedarán como incapaces, no, Señora Keiko? A costa de nosotros. No importa que caigan nuestros casi 10 mil proveedores y por tanto arrastren a sus familias. No importa, eso es lo de menos”, señaló en su cuenta.
La gerente de Graña y Montero señaló que la empresa está dispuesta a ser investigada y envió un rotundo mensaje contra Keiko. “No vamos a tolerar que te tires abajo al país en virtud de tus necesidades e intereses”, enfatizó Drago.
Drago subrayó que esta medida anticonstitucional aprobada por la mayoría fujimorista tiene por detrás el odio y ganas de venganza de Keiko Fujimori tras perder.
“Este es el inicio de una ruta que me recuerda épocas nefastas de abuso de poder. Caemos nosotros y caerán como fichas de dominó las demás constructoras. Luego seguirá la prensa y luego otras industrias. Porque eso pasa en un país donde no hay institucionalidad. Donde gobierna la rabia, el odio y las ganas de venganza”, manifestó.
