Tras un operativo para detectar e incautar celulares robados en Lima, un efectivo policial le dio la lección de su vida a un comerciante que fue intervenido por las autoridades pues se le encontró varios smartphones robados recientemente.
Como se sabe la Policía Nacional del Perú cuenta con equipos portátiles para verificar in situ si un celular es robado, sólo con el código IMEI (se obtiene con *#06#). Esto implica que un usuario debe reportar el robo a la compañía operadora y en operativos policiales el sistema puede detectar su equipo e incluso recuperarlo.
Eso es lo que pasó con uno de los vendedores de estos equipos a quien un policía le increpó por su actitud, incluso demostrándole como forma parte de la cadena delictiva.
«Esto ha sido robado el día de ayer y usted ya lo tiene. Usted tiene que saber o establecer la legalidad del teléfono que usted va a comprar y si es robado no lo compre porque ahora ya es parte de un delito», le explicó el policía.
Callado y asustado, el vendedor sigue escuchando al policía: «Usted no sabe como se ha obtenido este teléfono, pudo haber violencia, pudo haber sangre. Usted tiene mamá?», le pregunta el policía y el comerciante contesta afirmativamente para luego recibir esta contundente respuesta. «¿Que tal si voy donde tu mamá, le tiro un manazo y le robo el celular y después voy y se lo vendo?, ¿qué sentiría usted?
De nuevo el vendedor de celulares robados responde brevemente: «Mal» y el policía le replica: «no creo que mal, le daría rabia y le daría bronca».
Se estima que en el Perú un 80% de los celulares que se de venden de forma ambulatoria son robados, el resto son de contrabando u otras formas delictivas.
F. Correo.
