El médico Luis Montalvo y el chofer de la ambulancia que lo trasladaba, Jesús Aguirre, murieron de manera trágica al ser arrastrada la unidad en que viajaban por un huaico. La ambulancia terminó en un profundo abismo de 300 metros y los cadáveres aún se encuentran en la zona.
Ambos fallecidos son personal de la Red de Salud de Huarochirí y se dirigían a prestar auxilio a algunos de sus colegas que habían quedado varados en la zona de Santiago de Puná, donde desarrollaron una campaña médica.
Los rescatistas han llegado a la zona para poder recuperar sus cadáveres, aunque se señaló que las labores podrán demorar por lo complicado del lugar.