Los bomberos voluntarios no solo arriesgan sus vidas al enfrentar emergencias con equipos inadecuados o en mal estado, sino que parecen estar condenados a seguir en esa situación por los limitados recursos que el Estado destina para apoyar su labor.
Entre el 2013 y 2016, a pesar de sus evidentes y urgentes necesidades, el presupuesto destinado a la institución se redujo en unos S/ 89 millones.
Víctor Mondragón, comandante general interino del Cuerpo General de Bomberos Voluntarios, asegura que esta disminución en sus ingresos ha perjudicado la capacidad de invertir en infraestructura y adquisición de equipos.
En 2012, el presupuesto anual de la entidad ascendía a S/ 117 millones, pero su nivel de ejecución no superó el 44%. Al año siguiente, entre recursos ordinarios, recaudaciones directas, donaciones y transferencias, ese monto se elevó a S/ 134 millones.
Desde 2014, no obstante, los fondos empezaron a recortarse. Ese año los bomberos recibieron S/ 112 millones; en 2015 les entregaron S/ 89 millones y este año solo les asignaron S/ 45 millones. Es decir, en los últimos tres años el presupuesto de la entidad se redujo en 66%.
Según Mondragón, el dinero que les destinan no permite ejecutar los grandes proyectos de inversión que tiene la institución y ha “frustrado” el proceso de modernización instrumental.
El funcionario asegura que el 65% de los equipos que tienen los bomberos son obsoletos. Esto incluye unidades contra incendios, vehículos de rescate, ambulancias, respiradores autónomos, mangueras, equipos de protección personal, entre otros elementos.
Para revertir ese panorama, de acuerdo con las proyecciones de la entidad, se requieren unos S/ 600 millones que podrían ejecutarse en un plazo de cuatro años.
“Si no hay decisión política de apoyar al Cuerpo General de Bomberos, todo se quedará en palabras”, declaró Mondragón a La República.
A pesar de esta situación, el presupuesto para el 2017 tampoco es significativo: apenas S/ 81 millones, según señala Cecilia Chacón, presidenta de la Comisión de Presupuesto del Congreso.
Mondragón sostiene que requieren unos S/ 160 millones para adquirir unidades contra incendios forestales y otras compras urgentes.
Cambios necesarios
En setiembre de 2015, a través de un decreto supremo, el Ejecutivo declaró en reorganización el Cuerpo General de Bomberos Voluntarios (CGBV), que hasta entonces estaba adscrito a la Presidencia del Consejo de Ministros. Un mes más tarde, la entidad pasó a ser parte del Ministerio del Interior (Mininter).
En abril de este año, la comisión reorganizadora remitió al Mininter la propuesta de la nueva Ley del CGBV, pero hasta la fecha no se aprueba. Según Mondragón, esta norma podría promulgarse en el marco de las facultades legislativas que el Congreso otorgó al Poder al Ejecutivo.
El proyecto de ley modifica la forma en que se elige al comandante general de los Bomberos, decisión que hoy recae sobre los brigadieres mayores que tiene la institución.
Cambios propuestos
En el marco legal propuesto, será el presidente de la República quién elija a la persona para el cargo, tal como ocurre con la dirección general de la Policía Nacional. Mondragón sostiene que este cambio permitirá acabar con las “pugnas internas por el poder”.
La iniciativa también plantea que los bomberos retirados reciban una pensión vitalicia y que tengan derecho a un seguro de vida financiado por el Estado. También se propone que los recursos que destina la entidad para atender accidentes de tránsito sean devueltos por las aseguradoras.
Otro de los cambios sustanciales es la creación de la Escuela Nacional de Bomberos, paso definitivo para la profesionalización del oficio de los hombres de rojo.
