La civilización Caral influyó en diversas culturas ancestrales con sus amplios conocimientos y destacó por el respeto a los recursos hídricos y la agricultura que manejaron en su tiempo.Así lo consideró la investigadora Ruth Shady, quien destacó que los estudios han permitido tener conocimiento de esta antigua civilización y en cómo manejó sus territorios y recursos.
“Destacaría el respecto a la naturaleza, ellos no ocuparon los valles, los respetaron para la producción agrícola, también tuvieron un respeto por el agua como recurso importante”, afirmó.
Precisó que tuvieron especialistas en el campo agrario, en la ciencia de mecánica de fluidos y en arquitectura o ingeniería estructural.
Caral se encuentra situada en el valle de Supe, a 182 kilómetros al norte de Lima, se le atribuye una antigüedad de 5000 años y es considerada la civilización más antigua de América. Es Patrimonio Cultural de la Humanidad.