El vocero de la bancada de Peruanos por el Kambio, Carlos Bruce, adelantó ayer que en el proyecto de ley que alista el Ejecutivo para crear el seguro de desempleo se planteará que este no reemplace a la Compensación por Tiempo de Servicio (CTS) y que sea voluntario para los nuevos trabajadores.
El último lunes el ministro de Economía y Finanzas, Alfredo Thorne, anunció que el Ejecutivo ya trabaja en el diseño de este seguro que fue una propuesta de campaña del presidente Pedro Pablo Kuczynski y que generó duras críticas de parte de Fuerza Popular.
Precisamente la congresista fujimorista Karla Schaefer, integrante de la Comisión de Economía, señaló ayer que el seguro de desempleo debe ser tratado con pinzas “porque de cierta manera es cambiar los derechos de los trabajadores formales, que son tan pocos, y ya lo tienen a través de la CTS”.
No obstante, dijo que tendrá que evaluarse la propuesta en forma técnica, de qué manera va a beneficiar al trabajador y a qué universo se aplicará.
También dijo que no se deberá permitir que se genere algún monopolio si se beneficia a una sola empresa aseguradora sino que se propicie la competencia para ver cuál ofrece las mejores condiciones. Esa posibilidad fue descartada por Carlos Bruce.
Sobre si la medida permitirá combatir la informalidad laboral, la legisladora comentó que se tendrá que ver el impacto. “Quiero que haya un sustento técnico, un análisis comparativo con otros países donde se está aplicando este seguro de desempleo, hay que visualizar el impacto”.
A su turno el congresista del Frente Amplio Alberto Quintanilla, también integrante de Economía, mencionó que cualquier sustitución para la CTS no deberá recortar los derechos laborales de los trabajadores.
“Los seguros de desempleo son muchas veces una forma de desprendimiento de las obligaciones por parte de los empleadores para no pagar la CTS y no nos parece conveniente”, advirtió.
Pensiones bajo la lupa
Thorne también anunció que dos comisiones, una técnica y otra política, se encargarán de plantear la reforma del Sistema Privado de Pensiones (AFP), y que serán lanzadas cuando se termine con el pedido de facultades.
Al respecto Bruce dijo que “la idea es rehacerlo todo” para dar una solución integral a todo el sistema de pensiones, incluido el público, privado y subsidiado como Pensión 65. Solo adelantó que el acceso al fondo para la adquisición de una vivienda se mantendrá “en tanto no haya una mejor alternativa”.
En ese tema Schaefer dijo que se tiene que asegurar una pensión digna a las personas e incluso planteó que podría ampliarse el acceso al fondo para pagar una hipoteca en caso de desempleo permanente.
Para Quintanilla se debe buscar un mecanismo que permita reducir las comisiones que cobran las AFP. “Los fondos de pensiones no pueden ser un negocio para las empresas sino un beneficio para los trabajadores”, anotó.
Al interior de esta comisión también se ha formado una subcomisión que deberá plantear una reforma del sistema. Schaefer estimó que el tema debe debatirse en la primera legislatura de 2017.
El primer vicepresidente, Martín Vizcarra, ha dicho brevemente que el proyecto de creación del seguro de desempleo recogerá la opinión de trabajadores y empresarios.
¿Qué se dijo en campaña?
En la campaña electoral Kuczynski planteó un seguro de desempleo contratado por las empresas, que garantice al trabajador el 80% de su sueldo hasta tres o seis meses luego de haber dejado de laborar.
Esto contemplaba dos escenarios: Por un lado, aquellos que ya se encuentran laborando y reciben una compensación por tiempo de servicios (CTS) podrían optar por quedarse bajo este régimen o cambiarse al seguro de desempleo. En tanto, todos los nuevos trabajadores sí ingresarían de manera directa al seguro de desempleo.
El objetivo de la propuesta era incentivar la formalidad laboral mediante la reducción de los costos de contratación. Así, mientras que en la actualidad la CTS representa un sueldo adicional al año –alrededor del 12,5% en el cálculo de la remuneración mensual–, la iniciativa contemplaba que el aporte esté entre 2,2% y 3,5% del salario mensual. Estos aportes se destinarían a un fondo común que luego cubriría los beneficios de cada trabajador durante el período de desempleo.