La Batalla de Junín ocurrió el 6 de agosto de 1824, fue el penúltimo enfrentamiento armado que tuvieron los ejércitos españoles y patriotas, a lo largo del camino a la Independencia del Perú.
El Ejército Patriota, comandado por el general venezolano Simón Bolívar, se enfrentó a los realistas liderados por el general español José Canterac.
Bolívar arengó a su batallón diciendo: “Soldados, vais a completar la obra más grande que el cielo ha podido encargar a los hombres… El Perú y la América entera aguardan de vosotros la paz, hija de la victoria. ¡Vosotros sois invencibles!”.
Al inicio de la batalla, la caballería patriota, al mando de Mariano Necochea, atacó a la española, pero sufrió muchas bajas y emprendió la retirada.
Cuando los realistas ya cantaban victoria, el batallón Húsares del Perú, al mando de Isidoro Suárez, los atacó por sorpresa. Entonces un escuadrón, al mando de Guillermo Miller, regresó y embistió a los españoles, provocando su huida.
Esta victoria permitió a los independentistas tomar Huancayo y avanzar al sur del Perú en busca del ejército del virrey La Serna.
Los españoles perdieron dos jefes, 12 oficiales, 245 soldados entre muertos y heridos, 80 prisioneros y más de 400 caballos ensillados.
Los independentistas sufrieron la baja de 45 soldados y 99 heridos. De ese total, 64 eran del regimiento Húsares del Perú, al mando de Andrés Rázuri.
Esta batalla duró unos 45 minutos.
En reconocimiento a la brillante acción de la caballería peruana, el general Simón Bolívar le cambió el nombre de Húsares del Perú por el de Regimiento Húsares.