Fue intervenido y conducido a la Comisaría de Huaral, un sujeto que sospechosamente merodeaba por la Alameda de los Héroes.
Al llegar el serenazgo y la policía, opuso resistencia, pero fue reducido y trasladado a la delegación policial. Ahí entre lágrimas el sujeto negaba haber cometido algún tipo de falta.
De pronto llegó el hijo de una comerciante que lo reconoció por haber agredido verbalmente a su señora madre por negarse a venderle, increpándole su mala conducta.