La iniciativa de la agencia espacial estadounidense, NASA, es realizada junto con el Centro Internacional de la Papa (CIP), con sede en Perú.
Esas instituciones iniciaron un cultivo experimental de papa en condiciones que simulan las del Planeta Rojo. El lugar elegido es el desierto de Pampas de la Joya, una región desértica fronteriza con Chile.
«Aquí tenemos 4.500 variedades de papa, por lo que Perú es un muy buen sitio para explorar cuál sería la que mejor se ajustaría a las condiciones marcianas», aseguró un vocero del CIP, institución parte de una red internacional de investigación agrícola.
Las fases de investigación incluirán tecnología desarrollada por la NASA, para replicar las condiciones atmosféricas de Marte y ver qué efecto tendrían sobre las plantas.
Quizás la papa peruana llegue a ser una de las bases futuras para la alimentación de astronautas y de pioneros en Marte.
Las papas son una excelente fuente de carbohidratos, glucosa, vitamina C, hierro y zinc.
