Probablemente, el dolor de muela es uno de esos malestares más molestosos que, a diferencia de otros, no permite que la persona continúe con su vida diaria con normalidad y, a menudo, se está tocando esa zona para tratar de aliviarlo.
Si sufre de este dolor, debe ir al odóntologo rápidamente. Sin embargo, existen remedios caseros que alivian de forma temporal este dolor, mas no lo curan, por lo que debe aproximarse a un dentista lo más antes posible.
Principales causas
Este molestoso dolor se puede deber a una caries en estado avanzado que ha llegado hasta a los nervios del diente. Otra razón puede ser por un absceso en el diente. Algunas veces se da también porque restos de comida han quedado entre los dientes y esto produce inflamación.
A estas razones se le suma la salida de la muela de juicio, una pieza dental que ha sufrida grietas y dolor en los oídos. Muchas veces, la persona puede sufrir de infecciones en las encías.
Hilo dental
Si crees que se trata de restos de alimento que han quedado entre tus dientes, vuelve a cepillarte y utiliza hilo dental para eliminar cualquier residuo de comida que puede estar causando inflación en alguno de tus dientes.
Analgésico
Si el dolor persiste es que no se trata de un alimento, sino de algo más grave por lo que debes ir al dentista rápidamente. Si no puedes hacerlo, al menos toma un analgésico para que calme el dolor temporalmente.
Hielo
Otra manera de aliviar el dolor es colocando una barra de hielo en tus mejillas a la altura de la zona del dolor. El frío ayuda a disminuir el dolor. Sin embargo, debes tener cuidado: no puedes aplicar hielo directamente sobre la muele porque esta al estar inflamada es sensible a temperaturas calientes y frías.
Gel
También puedes aplicarte un gel que insensibiliza los dientes y encías. Este gel es de venta libre y debes aplicarlo directamente al diente afectado. Sin embargo, el efecto dura solo horas, por lo que debes ir al dentista.
Sal
Si se trata de un absceso o una infección por alimento descompuesto entre los dientes, puedes echar sal a esta zona, gracias a su poder antiséptico. Otra opción es que mezcles sal en agua y con ese líquido te enjuagues la boca reiteradas veces.
Clavos de olor
Los clavos de olor también pueden funcionar como remedio casero. Solo debes aplicarlo directamente a la zona afectada. También puedes echar cinco clavos de olor en un vaso de agua y tomar el líquido para enjuagarte la boca.
Estas recomendaciones son generales y momentáneas. El principal consejo que cualquier odontólogo le puede dar es que asista lo antes posible al dentista y puedan revisarlo para tener un diagnóstico más preciso.
La Republica