El joven Brayan Rosales Guardia de 21 años de edad, que atravesaba por un cuadro de depresión, estuvo a punto de quitarse la vida arrojándose a un acantilado de Barranca.
El suboficial Juan Carlos Alvarado Zevallos, llegó a la zona y decidió descender al peligroso lugar para entablar una conversación con Rosales Guardia y persuadirlo a cambiar de actitud.
Luego de varios minutos de tensión, el efectivo policial aprovechó que el joven estaba distraído, se acercó y logró abrazarlo, aferrándose de su brazo. Sus colegas y pobladores de Barranca también descendieron para ayudarlo hasta que finalmente el joven desistió.
“Esta persona no dudaba en tirarse del barranco. Yo como miembro de la Policía Nacional tuve que hacer todo lo que estaba a mi alcance para salvarle la vida”, dijo Alvarado.
El muchacho fue trasladado a un hospital de la zona en donde quedó internado, mientras que el suboficial fue felicitado por su valerosa acción.