No hay retroceso. No hay manera de detener esto, que no sea asumiendo una actitud beligerante para que se respete nuestro derecho a una vida limpia de contaminación.
Huaral está condenado a convertirse en un emporio minero. Más de 600 autorizaciones de explotación minera, otorgadas por el gobierno central en nuestro territorio, una procesadora de minerales que aspira a reemplazar a La Oroya, dos centrales hidroeléctricas para brindar energía a esas empresas, un puerto de embarque de minerales en Chancay y más de 30 mil hectáreas de tierra otorgadas a las empresas mineras (solo en el distrito de Huaral), así lo determinan.
Todo este plan se ha ido desarrollando desde hace varios años, con autoridades que con toda seguridad han recibido dinero para no decir nada. Porque ingenuos no creemos que sean. ¿Quién puede aceptar por ejemplo, que por un silencio administrativo la empresa Río Seco, que pertenece a la multimillonaria Buenaventura, haya logrado la licencia para construir su planta procesadora? Y ¿Quién puede creer que la Comunidad Lomera le vendió ingenuamente terrenos a dicha empresa?.
Pero las mineras ¿Han cumplido con todos los requisitos que exige la ley para obtener sus autorizaciones?. ¿Quiénes han visto sus estudios de impacto ambiental?, ¿Se ha hecho la Consulta Previa a las comunidades que serán afectadas, como exige la ley? Y por último ¿Qué beneficios concretos obtendremos por aniquilar nuestra agricultura y envenenar a nuestros hijos con los relaves y la contaminación del agua, el aire y los suelos?.
La inmensa riqueza que produce la explotación minera, será para personas que ni siquiera conocemos ni conoceremos nunca. Ni siquiera habrá posibilidades de trabajo como algunos pretenden engañar. Solo cosecharemos: más pobreza, enfermedades y muerte. Claro que quienes autorizan esto tampoco son de Huaral y menos viven o vivirán en este futuro territorio plagado de contaminación.
El documental “Hija de la Laguna”, es reflexivo respecto al papel que cada quien asume ante la explotación minera y debe ser visto para asumir una posición que será de mucha utilidad en los próximos años, pero que ahora nos debe llevar a exigir a nuestras autoridades, una mayor preocupación por este tema.
