Ya un juez del condado de Gwinnett firmó la orden de ejecución el lunes 25 de febrero de 2015 ,la mujer será ejecutada a las 7:00 p.m., cuando se le suministre un coctel de químicos vía inyección letal.
¿Pero qué crimen cometió Gissendaner para merecer la pena de muerte, si desde el 1945 Georgia no ejecutaba a una mujer?
La mujer fue sentenciada a muerte en noviembre de 1998 luego de ser convicta por asesinar a su esposo enviando a su novio a cometer el delito. Su entonces pareja, Gregory Bruce Owen, confesó el plan y testificó en contra de ella. Al declararse culpable y ser testigo en contra de Gissendaner, Owen esquivó la pena de muerte y fue sentenciado a cadena perpetua.
Owen relató durante el juicio el plan que Gissendaner, madre de tres niños, diseñó para matar a su esposo.
Doug Gissendaner, la víctima, fue asesinado el 7 de febrero de 1997 tras ser secuestrado, llevado a un lugar desalojado y asesinado con varias puñaladas en el cuello y espalda.
Según la evidencia presentada en corte, ella se fue a una discoteca esa noche y condujo luego a la escena del asesinato para cerciorarse que su esposo estuviera muerto. Posteriormente, ella le dio a Owen una sustancia inflamable para que prendiera en fuego el carro de su esposo.
Para evitar la pena de muerte, Bruce Owen testificó en contra de su novia.
Ambos acordaron quedarse con el reloj y la sortija de matrimonio de la víctima para que luciera como un intento de robo que salió mal.
Si Gissendaner es ejecutada, sería la segunda mujer ejecutada en el estado de Georgia.
La última cena
Como de costumbre, a los confinados que enfrentan la pena capital, se les concede una última cena. Gissendaner ya hizo su pedido oficialmente y no es sorpresa que la lista es extensa.
La mujer pidió pan de maíz con mantequilla, dos Whoppers con queso de la cadena de comida rápida Burger King, dos porciones grandes de papas fritas, helado de vainilla y cerezas, palomitas de maíz, una ensalada con huevos hervidos, tomates, pimientos, cebollas, zanahorias y queso con aderezo Newman’s Own buttermilk y para tomar una limonada.
Si la ejecución se concreta, Gissendaner sería la persona número 35 en morir por medio de la inyección letal en Georgia.La última mujer en ser ejecutada en Georgia fue en 1945.
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