Las fiestas Candy y las fiestas Semáforo ya pasaron de moda, ahora son las fiestas Arcoiris, una nueva modalidad de reuniones peligrosas donde adolescentes de 11,12, 13 y 14 años compiten teniendo sexo oral. Especialistas advierten de las consecuencias de estas fiestas.
¿QUÉ SON?
En estas reuniones o “reus”, los adolescentes toman alcohol, a veces drogas, y las chicas se pintan los labios de colores fuertes y les practican sexo oral a los chicos, quien tenga el pene con más colores gana.
Los especialistas advierten de los riesgos que conlleva esta nueva modalidad de reuniones; según el sicólogo experto en sexualidad, Christian Martínez, explicó en América Tv, que estos “juegos”, puede producir traumas en los menores o incitar a actos más violentos, como una violación.
Exhortó a los padres estar alerta, y conversar con sus hijos para informar los peligros que corren al realizar este tipo de actos contra el pudor; entre ellos, puede promover violencia hacia las adolescentes, que pueden ser catalogadas como una chica fácil por realizar sexo oral.
Además de riesgos de enfermedades de trasmisión sexual. Otra sicóloga, en RPP, comentó que este tipo de fiestas afecta a toda clase social; en otros países este tipo de fiestas es algo antiguo, un ejemplo de esto es que en Nueva York, Estados Unidos, en el 2005, ya se hacían encuestas respecto a ello.
La sicoterapeuta y sexóloga Silvina Belmonte, explica en su blog que estas fiestas engloban un gran problema, pues el sexo oral finalmente es sexo, no un juego y se pueden contagiar de enfermedades entre las famosas verrugas genitales; indica que las niñas son las más perjudicadas.
“Si bien para el varoncito, disfrutar de estos placeres a temprana edad, no causa en general problemas psicológicos, para las “nenitas” en cambio, andar jugando al sexo no es bueno”, advirtió.
Añadió que muchas niñas que tienen actividades sexuales de esta índole, más que ser personitas “modernas” y “liberadas”, están tratando de ser adaptadas al grupo. Finalmente, recomendó a los padres hablar con sus hijos de sexo sin pelos en la legua.