Con justificada molestia e indignación, el Comisario de Huaral, Comandante José Solano Grandez, manifestó que a los delincuentes que son capturados se les hace saludar a la bandera y se les dice que se vayan, con el simple castigo de reparar los daños que han ocasionado y con algunas exhortaciones, “pero cuando ellos salen de la comisaría, se burlan de la autoridad y vuelven a involucrarse en delitos. Es un círculo vicioso de nunca acabar”, expresó.
“Estos señores aumentan su peligrosidad y se van injertando con otros grupos delictivos, haciéndose cada vez más poderosos, ya que se proveen de armas y otros medios. Me parece personalmente que estamos fallando y esto se tiene que corregir. La policía hace todos los esfuerzos, pese a sus limitaciones, pero esto hace que nuestro personal se desanime y se desmotive, cuando hoy más que nunca la seguridad es prioritaria”, manifestó.
Dijo que hay un análisis equivocado del espíritu del Nuevo Código Procesal Penal, pero que quienes tienen la responsabilidad de hacerlo cumplir, han priorizado los plazos, la reducción de la carga procesal y de las salidas alternativas, que nuestra idiosincrasia no está preparada para su aplicabilidad.
“Se priorizan estos aspectos, cuando lo que se trata es de luchar contra el crimen organizado y hasta los robos al paso tienen una pena de hasta 8 años de cárcel efectiva”, concluyó.