Las personas más preparadas son las que tienden a disfrazar su personalidad impulsiva-agresiva, pero siempre hay formas de identificar ese tipo de trastornos, especialmente, cuando son confrontadas, se enfurecen y pierden los papeles, así alertan los especialistas del Sisol.
El psicólogo Alberto Medina, especialista de Sisol Joven manifestó que una forma de reconocer a una persona con estas características es en base a la respuesta de dos preguntas claves:
– ¿Cómo es la relación con sus padres y sus hermanos?
– ¿Cómo estas relaciones han contribuido en su crecimiento social?
“A través de esa historia nos daremos cuenta cómo es que los padres y hermanos han influido en su capacidad afectiva, en su capacidad de tolerancia a las frustraciones, en su impulso de vida, etc. El lenguaje y la comunicación en el seno familiar influyen tremendamente en la personalidad”, expresó.
Explicó que si esta persona evade hablar del tema y simplemente dice “normal”, en realidad no lo es, pues cuando hay una verdadera significancia, una trascendencia de la familia, la persona da detalles sobre su relación con ésta:
– ¿Cómo jugaba con sus padres?
– ¿Qué hablan a la hora del almuerzo?
– ¿Cómo es un fin de semana en familia?
«Se trata de una serie de anécdotas que reflejan la cercanía con su familia”, refirió el especialista.
En su relación con la sociedad, rompe las reglas de convivencia y los hábitos de cortesía, la tolerancia y el control de impulsos:
– ¿Cómo se comporta en un restaurante?
– ¿Cómo pide algo?
– ¿Cómo llama a otra persona?
«Es la forma de darse cuenta si hay un nivel de impulsividad y/o de agresividad, hay gente que no tolera la espera”, manifestó.
También hay que tener cuidado con las personas muy rígidas de ideas y pensamientos, sin apertura y flexibilización a escuchar más. Muchas de ellas se rigen por horarios, normas de convivencia, de higiene, etc., son personas predispuestas a desarrollar una conducta impulsiva-agresiva.
Agregó que en el lenguaje corporal también hay signos que permiten reconocer a una persona impulsiva:
– Cuando conversa con las manos, hombros y cabeza hacia atrás.
– Cuando se expresa con una mirada penetrante y fija.
Actualmente, muchos jóvenes y adolescentes también demuestran un comportamiento impulsivo/agresivo con estas señales:
– Cuando se evidencia en una rebeldía frente a las normas.
– Intolerancia e impulsividad, esto debido a una serie de frustraciones.
– Resentimientos y falta de comunicación.
– Afecto en el seno familiar.
RPP