La empresa brasilera Indra, en convenio con la Universidad de León de España para experimentar en su Centro de Excelencia en Sistemas de Seguridad (CES) con inhibición de comunicaciones a través de telefonía celular, bluetooth o wi-fi, desarrollará sistemas de inhibición de comunicaciones en diferentes centros penitenciarios, universidades y centro de convenciones del resto del mundo.
Dicha idea consiste en cancelar las comunicaciones personales, por lo que ya se habrían mostrado interés algunas universidades para prevenir los plagios en exámenes.
Estos sistemas constan de un conjunto de transmisores de radio controlados en forma remota desde un centro de vigilancia que se distribuyen en el recinto para bloquear las conexiones entre dispositivos.
Según refiere la empresa, su costo de instalación dependerá del área por inhibir y de los niveles de cobertura detectados en el entorno, y estaría en sus planes colocarlos en instituciones peruanas.
Fuente: La Republica