El portavoz del Papa, el padre Federico Lombardi, ha señalado en la televisión vaticana que la obsesión por las tecnologías modernas, como el móvil e Internet, no está dejando tiempo suficiente para que la gente se dedique a tareas espirituales, y que sin vida espiritual, corren el riesgo de perder sus almas, según informa The Telegraph.
«En la era del teléfono móvil e Internet es más difícil que nunca proteger el silencio y percibir la dimensión interior de la vida», ha declarado. «Hoy en día, esto significa una amenaza muy grave».
El Vaticano ha advertido varias veces sobre los riegos espirituales de la vida moderna. El propio Benedicto XVI ha llegado a señalar que la crisis económica actual era una prueba de que la obsesión por el dinero y el éxito no tiene sentido y que el bienestar económico no significa nada.
En todo caso, la Iglesia católica ha abrazado también las nuevas tecnologías, con el objetivo de hacer llegar su mensaje a los más jóvenes. Durante la celebración de la última jornada de la juventud, celebrada en Sidney (Australia), el Papa envió mensajes de texto a los assitentes, a los que se animaba a orar con rezos escritos en pantallas gigantes.
20 Minutos/Huaralenlinea